jueves, 19 de marzo de 2015

Todas las criaturas grandes y pequeñas y el encinar cantábrico


Es de todos conocido que el hombre desciende del mono. Bien, pues eso es esencialmente FALSO. No se me asuste el lector. No me he vuelto creacionista ni negador de toda evolución biológica. Mucho de aquello que contó Charles Darwin en "El origen de las especies" sigue vigente, corregido y aumentado y, los descubrimientos científicos posteriores en el campo de la genética y bioquímica le dan bastante razón. Por lo menos más razón que a sus opositores de entonces.

No es que el hombre descienda del mono sino que ES un mono. Ya lo siento, es lo que hay y, si uno lo piensa bien, no es para tanto. ¡Ah!, por cierto, me refiero al hombre en sentido extenso. Seré políticamente correcto y diré que también la mujer ES una mona (o quizás lo tendría que haber dicho en primer lugar o con una @). Lo siento chicas, tampoco os libráis.

Creo que  nadie se le escapa un detalle al contemplar el panorama de seres vivos sobre la faz de la Tierra. Lo primero,  excluyamos todos los individuos humanos que nos rodean (si, excluyamos, por mucho que algunos nos atraigan, siempre alguno nos resultará repulsivo, y a buen seguro la mayoría indiferentes). Bueno, a lo que vamos, excluyamos a los humanos y fijémonos en el resto de las cosas vivas. Curiosamente .... SE PARECEN.

Y digo se parecen porque, los gatos se parecen a los tigres y a las panteras, Los langostinos y las cigalas de las paellas guardan cierto parecido (esto lo digo para todo aquel al que la crisis todavía permita incorporar a su dieta tan noble ingrediente). También, y pasando al primer plato, la coliflor y el brócoli se parecen y el inofensivo champiñón es tan similar a la temible Amanita phalloides que más de uno ha tenido una "mala digestión" (por decirlo suavemente).

Y alguno ya se estará preguntando. Y yo, ¿a quién me parezco?. Bueno, depende cómo se mire. Para empezar, los seres humanos nos creemos muy diferentes unos de otros. Nos creemos muy diferentes  porque no soportamos a nuestra suegra, que no es sangre de nuestra sangre y evidentemente es mucho peor que nuestra madre. La humanidad se ha liado ancestralmente a palos por un quitame allá estas diferencias. Diferencias raciales, culturales, de ideología, deportivas, Oxford o Cambridge (esto lo pongo para darle un aire intelectual y académico al artículo y hacerle digno de respeto).

Por otra parte nos complacemos en exagerar las similitudes entre nosotros. Y si no ¿que hacen miles de personas en un estadio insultando salvajemente a la vez al colegiado?. Nos complacen las catarsis colectivas, cuanto más colectivas mejor. En resumen, todo el día buscando a quien parecerse y de quien diferenciarse.

La diferencia o el parecido entre los humanos están sobrevaloradas. Nos viene muy bien sobrevalorarlas. Nos ha venido muy bien saber diferenciar al amigo del enemigo, al familiar del extraño, al afín del contrario. Nos ha venido muy bien para establecer familias, clanes, empresas equipos de fútbol, partidos políticos o sociedades micológicas.

Pero no nos engañemos. NO somos tan diferentes. Vamos a atender a una cuestión que da lugar a pocas interpretaciones subjetivas, personalistas, ideológicas: el parecido o diferencia GENÉTICA. En otro artículo de este blog, titulado "Quienes somos, de donde venimos, a donde vamos..." se ha explicado todo esto de los genes. Aprovecho para autoreferenciarme que siempre da boato y prestigio y aprovecho para endosarle al lector (o lectora) otra chapa infumable pero supuestamente instructiva (la ciencia si no es aburrida, parece que no es seria ¿no?).

Para el que no tenga tiempo, ganas ni ánimo para leerla, resumiré que los genes son instrucciones para la fabricación y funcionamiento de un ser vivo, sea cual sea. Estas instrucciones están "escritas" en el ADN ( de nuestras células y están escritas en el mismo lenguaje en todos los seres vivos (el código genético). En estas instrucciones se determina como se forma nuestro cuerpo, cómo funciona. Se determinan cosas tan básicas como el número de huesos que tenemos y cuales o las enfermedades que somos mas propensos a sufrir. Esto está "escrito" en un sistema bioquímico en todas las células, en la estructura del ADN y en realidad determina la mayor parte de nuestra existencia. Es como si todos tuviéramos un texto escrito, una novela o algo así, con párrafos importantes sin los cuales nos sería imposible entender el relato, otros menos relevantes y también algunos párrafos prescindibles, por qué no decirlo.

Y digo esto porque creo que, a pesar de nuestra supuesta libertad de elección, el haber nacido humano determina tu existencia en un grado altísimo, sobre todo si lo comparamos con haber nacido, por ejemplo, percebe. Y si no, imaginemos nuestra existencia adosado a una roca de la "Costa da Morte" filtrando agua del Atlántico y esperando pacientemente a la cuchilla de un osado "percebeiro".

Entonces, vuelta a la pregunta: ¿A quién me parezco?. Ahora igual tendríamos que decir "¿A los genes de quien se parecen mis genes?. Volviendo al símil. a la "novela" de quien se parece mi "novela". Esto es como si aplicáramos un  comparador de textos a dos novelas. Nos diría si hay diferencias y dónde están, en qué párrafos. Esto se puede hacer con los genes y se puede comparar, mediante pruebas de laboratorio el parecido que tiene el conjunto de genes de un individuo con otro. Incluso de un individuo, por ejemplo humano, con otro de otra especie por diferente que sea, por ejemplo un mejillón.

Bueno, pues cuando hacemos esto (que se ha hecho) se descubre que entre todos los seres humanos hay como mucho una diferencia del 0,1%. Es como si todos tuviésemos la misma novela, letra por letra, y sólo cambiase el último párrafo. En sentido estricto, dos hermanos gemelos serían como la fotocopia de la misma novela y los miembros de una familia se diferenciarían en palabras dentro de ese párrafo. Todos los humanos del planeta tienen diferencias más o menos acusadas en el "texto" pero siempre dentro del 0,1%, esto es siempre dentro de ese párrafo.

Así que estas tenemos. No somos tan diferentes. Como máximo sólo este 0,1% es lo que diferencia a Hitler de la Madre Teresa de Calcuta y a nosotros de nuestra suegra, y al colegiado de los que le insultan en la grada. Por esto decía que las diferencias entre humanos están sobrevaloradas.

Qué pasa cuando hay una diferencia MAYOR de ese 0,1%. Pues que nos encontramos con seres vivos de OTRA ESPECIE, no humanos. Desde muy parecidos, como los chimpancés (no os creáis que tanto, sólo un 1,5%) hasta muy diferentes como las  moscas (un 50%).

 Cuando sobrepasamos ese 0,1% de diferencia, se puede decir que la novela merece otro título, que es otro relato, aunque sea parecido, merecería otro ejemplar en una biblioteca y una ficha diferente en el catálogo. En la naturaleza, esta diferencia genética, la que establece el salto entre una especie y otra, provoca diferencias de gran importancia. Una de las más relevantes es que es prácticamente imposible que se puedan reproducir dos individuos de diferente especie entre sí. Es imposible cruzar a un humano con una oveja, aunque muchos lo hayan intentado. La ESPECIE, es la unidad básica de la clasificación de los seres vivos.

Esto de la reproducción cruzada tiene, como toda norma biológica sus excepciones, los llamados HÍBRIDOS. Son seres que, generalmente artificialmente, se han logrado cruzar. Es el caso de los mulos (cruce entre caballo y burro) o ciertos mixtos de pájaros, así como algunos vegetales. Muchos de estos híbridos son en si mismo estériles, con lo que esto se convierte en algo en general anecdótico, sobre todo en animales.


Y aquí estamos llegando al fondo del asunto. Las diferencias que observamos entre los seres vivos responden a una diferencia genética que es mayor cuanto mayor la diferencia. O si se prefiere, a mayor diferencia genética mayor diferencia real. Por ejemplo, la diferencia genética entre cualquier humano y un chimpancé es de 1,5%. Volviendo a la metáfora de la novela. Si comparamos el "texto" de un humano con el de un primate como el gorila se diferenciaría en una página (recordemos que entre los humanos sólo era un párrafo), y si lo comparamos con el de otro mamífero la diferencia sería de varias páginas, e incluso de un capítulo. Si lo comparamos con el de un gusano de seda, sería una novela bastante diferente pero pertenecería al mismo género literario. Si lo comparamos con el de una planta, ni siquiera eso, pero habría frases parecidas y, en alguna parte, similares recursos literarios. En resumen, como TODOS los seres vivos tienen material genético, todos pueden emparentarse entre si y de hecho lo están.


Diferencias graduales

Y una cosa más. No sólo es que nos diferenciamos gradualmente de otros seres vivos sino que cada ser vivo se diferencia gradualmente de todos los demás. Me explico. Un gato, se diferencia genéticamente de nosotros en un porcentaje. Pero se diferencia mucho menos de un tigre, de un león o de una pantera, y en general de todos los FELINOS, que se parecen entre sí. Un naranjo se diferencia en sus genes mucho de nosotros, pero se parece bastante también en sus genes a un limonero y a un mandarino y a otros CÍTRICOS.

En resumen, es como si atendiendo a sus genes, se podrían agrupar TODOS los seres vivos en una especie de "familias", con sus miembros bastante parecidos entre si y diferenciados del resto. Igualmente podemos ver que hay ciertas "familias" que guardan parecidos entre sí, como si estuvieran "emparentadas". Vamos, que podríamos tener algún parentesco con los gatos, porque tenemos pelo, cuatro extremidades y sangre caliente. Pero si pensamos en un langostino, que no tienen nada de esto, el parentesco se nos hace más difícil.

Y alguien dirá: Bueno, para esto no nos hace falta la genética. Esto ya lo podemos ver a simple vista. Está claro que soy más parecido a un chimpancé que a un langostino (bueno, tengo que confesar que me ha sorprendido el parecido con mi suegra). Todo esto parece intuitivo, que se vislumbra a simple vista. Y es verdad ... o no. A veces no es tan evidente, depende en qué nos fijemos. ¿alguien sospecharía que un percebe está más emparentado con un langostino que con un mejillón, aunque esté pegado a una roca filtrando agua? ¿Alguien sospecharía que un delfín esté más emparentado con nosotros que con un atún?. ¿Alguien sospecharía que el algarrobo, que es el árbol del que se colgó Judas, está más emparentado con el garbanzo que con un manzano?. Pues claro que alguien lo sospechó y hace bastante tiempo que lo sospechó.

En 1735, nadie tenía ni idea de genética ni de genes ni de ADN. Y cuando digo nadie es nadie. Pero eso no quiere decir que nuestros predecesores fueran tontos o poco observadores. Y cuando digo nadie es incluyendo a un personaje del que hablaremos a continuación.

En 1735 el reino de Suecia no era precisamente una de las potencias mundiales, pero eso no evitó que se contagiara de la corriente ilustrada que invadía la Europa de la época. Muchos de los hijos de familias acomodadas, tomaron el incómodo pero gratificante camino de la formación científica. Muchos de los descubrimientos clave en la ciencia y en la tecnología y muchas las bases fundamentales del conocimiento científico se asentaron en aquel fecundo siglo XVIII. Estos descubrimientos fueron obra más del criterio estricto y científico que consecuencia de avances tecnológicos.

Cuando un naturalista del siglo XVIII, se encontraba con la diversidad de seres vivos, poco podía hacer más que observarlos, analizarlos, coleccionarlos, describirlos, dibujarlos.... (digo poco, pero no es poco). No disponía de un laboratorio de genética, ni de biología molecular donde hacer experimentos para saber la similitud genética de la que hemos hablado antes. Así que se tenía que contentar con la observación, con lo que veía.

El sueco Carl von LINNEO (1707-1778), era hijo de un pastor luterano muy aficionado al estudio de las plantas y que se empeñó en darle al joven Carlos una formación avanzada, con un tutor personal. Sin embargo Linneo, gustaba más de irse al campo en busca de plantas que de estudiar. Su especialidad tras doctorarse fue la sexualidad de las plantas, esto es la manera y tipos de reproducción o sea todo aquello relacionado con las flores y sus tipos. Además de esto, la formación de la época era bastante extensa y variada y no era raro que un científico hubiera estudiado cosas como latín, teología, filosofía, matemáticas, zoología y geografía.

Carl von Linneo y uno de sus herbarios

Por lo tanto y a través de la botánica, el problema de la clasificación de los seres vivos y en particular de las plantas no era extraño para Linneo. Para empezar se dio cuenta de que ya darle nombre e identificar a una especie no se hacía de una manera estricta. Muchas veces un mismo nombre se le daban a especies diferentes y una misma especie tenía nombres diferentes. Linneo también conocía las obras de sus predecesores. Sobre todo del francés JOSEPH PITTON DE TOUNERFORT (1656-1708) y del ingles JOHN RAY (1627-1705). Ambos dos, en sus obras intentaron hacer una descripción y clasificación de plantas, con la intención de llegar al concepto de ESPECIE. Mucho antes, el italiano ANDREAS CAESALPINUS (1519-1603), un gran experto en plantas, pensó en la necesidad de establecer un sistema simple y predictivo para nombrarlas y clasificarlas. E incluso hizo alguna clasificación de algunas especies de plantas.

Caesalpini, Tournefort, Ray y sus respectivas obras

Y ante esto, a Linneo se le ocurrió que debía de existir un sistema para nombrar no solo a las especies de plantas, sino en realidad a todos los seres vivos. El nombre de una especie debía ser UNÍVOCO que quiere decir que cada especie tiene un único nombre y cada nombre designa una única especie y así evitar que no se sepa a qué especie nos referimos cuando decimos un nombre o que cuando vemos un animal o una planta podamos darle un nombre que lo diferencie de otros animales y otras plantas. Esto, aunque parezca baladí, es necesario, especialmente en el campo científico. ¿cómo podríamos decir sin equivocación cuales son los seres vivos objeto de nuestro estudio y experimentación?

Pero ¿no tenemos y teníamos ya esto? ¿no tenemos en nuestros respectivos idiomas palabras que designan seres vivos? ¿no le llamamos al gato gato y no perro?. Si pero este sistema es muy imperfecto. Por una parte, si vemos una tortuga la llamamos tortuga, pero hay muchas especies de tortuga que son especies diferentes. Podríamos decir tortuga de tierra o acuática. Tampoco sería perfecto, asimismo hay muchas especies de tortuga acuática. Podríamos decir: Tortuga de Florida, bien, igual sólo hay un tipo de tortuga en Florida (lo dudo), pero ¿en Florida la llaman tortuga de Florida? o ¿de otra manera?

Otra imperfección de este sistema es precisamente que a una especie se la denomine de manera diferente en zonas muy reducidas geográficamente. Sin ir más lejos, al madroño (ese árbol en el que se apoya un oso en el escudo de Madrid), en la comarca de las Encartaciones se le llama BORTO  y al sirón (una especie de serpiente inofensiva) en las Encartaciones se la llama ENÁNAGO. Cuando un encartado cruza el Nervión y se pone a hablar de bortos y enánagos le miran raro, como si viniese de otro planeta.

Un BORTO y un ENÁNAGO (clase gratis de idioma Encartado)

Si a esto añadimos las diferencias entre los diferentes idiomas mundiales y su derecho inalienable a darle nombre a todo lo propio y extraño el panorama es desolador y explica por qué Linneo pensó que había que poner orden en todo esto.

Y así fue cómo Linneo escribió las dos grandes obras por las que es conocido  Systema Naturae (1735) y Species Plantarum (1758). Estas obras las escribió en Latín que en aquella época era algo así como un idioma universal, o por lo menos el idioma universal de la ciencia. Algo parecido a lo que sería hoy en día el inglés.

Las pretensiones de estas obras eran enormes, pero se puede decir que cumplieron. Una de las pretensiones era CLASIFICAR los seres vivos. Pero clasificarlos en base a un criterio NATURAL. ¿Qué quiere decir un criterio natural?. Es fácil verlo si tenemos en cuenta la clasificación mediante criterios NO NATURALES. Por ejemplo, clasificar las setas en comestibles y no comestibles no es un criterio natural, la naturaleza es ajena a nuestra capacidad de digestión de una determinada seta, puede haber dos setas muy parecidas y una ser venenosa y otra no (como el champiñón y la Amanita faloides) y dos setas diferentes y ser ambas comestibles (como el champiñón y los boletus). Tampoco es un criterio natural clasificar los animales en terrestres y acuáticos. En el mar viven desde peces hasta caracolillos, pasando por tortugas. También en tierra viven tortugas y caracoles. Intuitivamente vemos que la tortuga de mar es más parecida a la de tierra que al langostino con el que convive.

Lo NATURAL era algo que ya se intuía hace siglos, Por ejemplo, el anteriormente mencionado Andrea Caesalpinus, pensó que era mejor clasificar las plantas por sus frutos y semillas que por sus propiedades medicinales. Entonces, en el siglo XVIII, que podía considerarse NATURAL. Si por aquellos años se hubiera conocido el ADN o la genética, la similitud genética podría haber sido un criterio.

La teoría de la EVOLUCIÓN tiene mucho que ver con lo que es NATURAL en una clasificación de seres vivos. Resumiéndolo mucho. Los ya célebres JEAN BAPTISTE LAMARCK (1744-1829) y CHARLES DARWIN (1809-1882), introdujeron el concepto de EVOLUCIÓN. El fenómeno de la evolución en los seres vivos consiste básicamente en el hecho de que todos los seres vivos proceden de un abuelo común. A lo largo de millones de años, la descendencia de ese "abuelo" va siendo cada vez más diferente del propio abuelo y diferente entre si. Así que todos los seres vivos somos "primos", más cercanos o más lejanos dependiendo de nuestra similitud. Por ejemplo, somos primos cercanos del chimpancé, un poco más lejanos del perro, y el perro y nosotros un poco más lejanos del langostino. Vaya, esto ya nos lo había dicho la genética ¿no?. Bueno, pues la clasificación NATURAL es aquella que refleje este parentesco. Las teorías evolutivas de Lamarck y Darwin intentaron, no sólo explicar lo del "abuelo" común sino como se había llegado a tamaña variedad de descendencia.

Jean Baptiste Lamarck, la evolución de una célula a un humano y Charles Darwin

Entonces ¿cuáles son las características en las que nos tenemos que fijar para que nuestra clasificación sea natural?. En el caso de las plantas Linneo estableció el aparato reproductor, las flores, como elemento de referencia. Así pudo juntar en un mismo grupo plantas tan diferentes como el trébol, la alfalfa, el garbanzo, la argoma y la acacia (todas ellas son leguminosas aunque tenemos desde hierbas hasta árboles). En general, y a simple vista ciertas características anatómicas pueden ser útiles. Pero cuidado, que la naturaleza nos puede jugar alguna mala pasada.

Por ejemplo, pensemos en un delfín y en un atún. Son dos seres de cierto parecido, viven en lugar parecido, tienen una forma parecida, tienen cola, aletas. Hasta ahí podríamos tener la tentación de agruparlos juntos en un grupo que podríamos llamar "simpáticos animales marinos saltarines y de cierto tamaño". Pero si nos fijamos bien hay ciertos detalles que los separan dramáticamente.

Simpáticos animales marinos saltarines y de cierto tamaño. Parecidos ¿no?

Para empezar no viene mal fijarse no sólo en el aspecto externo sino también en el interior (el interior es lo que importa, decimos los feos). Si hacemos una radiografía, en el atún descubrimos una simple raspa, de la cabeza a la cola, sin cadera sin extremidades. Las aletas son como independientes del resto del esqueleto. La radiografía del atún nos descubre que el interior de sus aletas esconde una auténtica "mano", con todos sus huesos, como la que pondríamos nosotros para nadar pero soldada bajo la misma piel. En la cola aparecen soldadas dos "piernas" que parten de una cadera, como si nos hubiésemos embutido en un traje de sirena. En el interior, el delfín tiene cuatro extremidades. Además tiene pulmones (por lo que tiene que salir obligatoriamiente a respirar a la superficie, donde un atún, con sus branquias moriría en minutos. El atún tiene el cuerpo cubierto de escamas y el delfín de pelo...

El esqueleto del delfín y el atún es bastante diferente, sobre todo si nos fijamos en las aletas


Sin embargo las aletas de ballenas y delfines vistas por dentro tienen los mismos huesos que la mano humana, la pata del gato y el ala del murciélago por lo que en realidad se trata del mismo tipo de extremidad transformada según convenga.

En resumen, que, atendiendo a estas diferencias, el atún es más parecido a una anchoa del cantábrico y el delfín a un jaguar del amazonas. Y esta es precisamente la clasificación NATURAL. A la hora de clasificar hay características que pesan más. Son características que establecen diferencias de importancia, relevantes que no se han cambiado en el transcurso de la evolución por un quítame allá esta adaptación.

En Sistema Naturae, Linneo propuso, en un primer lugar separar los seres vivos en animales y plantas y a partir de ahí fue agrupando los seres vivos en diferentes niveles. La unidad fundamental era la ESPECIE. Las especies más emparentadas se agrupaban en GÉNEROS, los ........ A esta clasificación se la llama TAXONOMÍA y a los niveles TAXONES.

Los géneros se agrupan en FAMILIAS, las familias en ÓRDENES, los órdenes en CLASES, las clases en FILOS o DIVISIONES y los filos en REINOS.


De esta manera se clasificaron todos los seres vivos de forma que, por ejemplo, los miembros de una misma familia tenían unas características comunes entre si y diferentes de los de otra familia, pero gracias a otras caracteristicas comunes, varias familias podrían agruparse en órdenes y así sucesivamente.

En algunos casos existen taxones intermedios como por ejemplo SUBORDEN, en este caso, sería que las diferencias entre los integrantes de un orden no son tan relevantes como para formar familias diferentes. Esto tiene un reflejo muy visual entre grupos de una misma especie. hay seres vivos que perteneces a una misma especie pero tienen diferencias que aunque en realidad no son relevantes son muy aparentes (pensemos, por ejemplo en los perros, todos son de una misma especie, pero hay multitud de razas y muy diferentes en tamaño, pelaje y comportamiento). Por debajo de la especie tenemos la SUBESPECIE. Existen subdivisiones por debajo de la subespecie , pero son diferentes y muy discutidas taxonómicamente.

Y ahora vayamos a la forma de nombrar los seres vivos o sea a la NOMENCLATURA. En primer lugar, Linneo propuso darle a los seres vivos nombres en LATÍN. Ya hemos dicho que el latín, en la época era algo así como un idioma universal, especialmente en la ciencia. De esta manera todo el mundo tendría un "espacio común" para referirse. Pero es que además tenía una virtud adicional, que ya por aquel entonces era una lengua muerta, es decir que hacía siglos que no se hablaba. ¿cómo puede esto ser una virtud?. Si una lengua está viva evoluciona con facilidad por el uso, cambian las expresiones, la ortografía... El latín ya no podía evolucionar y así se aseguraba que las denominaciones que se dieran se mantuvieran y nadie tendría la tentación de adaptarlas. La estabilidad de los nombres era una de las condiciones principales necesarias. Hoy en día aunque ya no se utiliza el latín como idioma universal (en ciencia es, por acuerdo tácito, el inglés), la nomenclatura científica de los seres vivos sigue siendo en latín o latinizado, incluso de especies recientemente descubiertas.

Pero ¿qué nombre latino poner a una especie?. La idea de Linneo es que fuera DESCRIPTIVO, es decir que cada especie tuviera un único nombre, por supuesto, el mismo nombre describiera, en lo posible, su clasificación. En un primer momento pensó en nombres que en realidad eran toda una frase. Pero esto era poco práctico así que finalmente pensó en reducirlo a dos palabras, las que definían el género y la especie.

La primera palabra define el género y la segunda la especie. Por ejemplo, el género Canis (que en latín significa perro) engloba los lobos y nuestros perros domésticos,  y otros como los coyotes o los chacales. Todos tienen las suficientes características comunes para pertenecer al género Canis. Así el lobo se denominaría

Canis lupus

Así, en latín, primero pondríamos el nombre del género, comenzado en mayúscula y después un nombre para la especie en minúscula. Todo ello en cursiva, porque está en latín y para resaltar que estamos dando el nombre científico. Así no habrá duda, todo el mundo, sea cual sea su idioma y procedencia geográfica sabrá que nos estamos refiriendo al lobo y no al chacal o a otro animal parecido. A una especie SIEMPRE la denominaremos con estas DOS palabras, por eso se llama NOMENCLATURA BINOMIAL. No podríamos decir únicamente Canis, porque no diferenciaríamos entre el lobo, el coyote y el chacal. Y no está permitido usar únicamente lupus, porque nos perderíamos una excelente manera de describir a qué género pertenece la especie. Es algo así como el nombre y el apellido de la persona, sólo que el apellido se pone primero. En este caso nunca existen dos apellidos iguales (no existen dos géneros con el mismo nombre), pero la palabra que designa la especie si se puede utilizar en diferentes géneros (por ejemplo, el trébol se llama Trifolium pratense y hay otra hierba que se llama Phleum pratense, como puede verse el nombre pratense se aplica a dos géneros diferentes y tenemos dos especies diferentes).

La selección de los nombres no sigue una regla fija, ni en el género ni en la especie. Linneo en muchos de ellos usó simplemente su traducción al latín (Felis para el gato, Trifolium para el trébol, Brassica para la berza...), pero tras veces se utilizan palabras latinas sobre su hábitat (pratense, en el prado), su uso (sativa, cultivable) o quien lo descubrió o en honor a alguien (por ejemplo, la bacteria Salmonella, se llama así en honor a su descubridor Daniel Elmer Salmon.

Nos hemos olvidado de nuestro perro doméstico. El lobo es Canis lupus, el coyote Canis latrans, el chacal Canis aureus, el zorro, se parece lo suficiente para pertenecer como los anteriores al orden de los cánidos pero los zoólogos han decidido que se diferencia lo suficiente de los demás para merecer otro género. El zorro es Vulpes vulpes. Claro, en  latín vulpes significa zorro. ¿Os acordáis de aquélla célebre actuación musical en los 80 del grupo "Las Vulpes"?. Para que luego digan que la zoología está reñida con la música.

Pero ¿donde está nuestro perro, con todas sus variedades?. Bien, pues nuestro perro sólo es un tipo de Canis lupus y aunque algunos perros parezcan muy diferentes al lobo (en general tienen el cráneo, el cerebro y los dientes más pequeños), según los zoólogos, no merece pertenecer a otra especie. En este caso es una SUBESPECIE más del Canis lupus. Cuando hay que detallar la subespecie se hace en latín, con un tercer nombre. Así nuestro perro sería:

Canis lupus familiaris

A veces se puede abreviar como C. lupus familiaris o Canis l. familiaris y algunos abrevian a Canis familiaris.

Y en muchos casos veremos una inicial al final del nombre que representa al primero que lo describió y curiosamente muchas veces veremos la L.

Trifolium pratense L.

Por supuesto L de  Linneo. Muchas especies, sobre todo vegetales fueron descritas por Linneo. Descritas, que no descubiertas, pero si clasificadas y nombradas con este sistema científico. En su obra posterior Species plantarum, Linneo llegó a describir un total de 7.300 especies de plantas, entre ellas el trébol que tapiza algunos de nuestros prados o Trifolium pratense.

Lo bueno de este sistema es que sirve para nombrar y clasificar a TODOS LOS SERES VIVOS. A "todas las criaturas grandes y pequeñas" (tal y como rezaba la famosa serie de televisión). Es  básicamente el sistema que se sigue usando. Este sistema, con algunos ajustes, ha permitido clasificar especies que no se conocían en tiempos de Linneo e incluso ha permitido clasificar y nombrar especies EXTINGUIDAS, como por ejemplo nuestra familiar Toucasia carinata, esas marcas fósiles que algunas veces podemos ver en los muros de piedra de nuestros pueblos y ciudades. (Vease Geología contra la pared).

El mérito de Linneo y de los naturalistas del siglo XVIII es haber llegado a esta ordenación sin saber nada de genética, de ADN ni del proceso evolutivo. Haber intuido esta "ordenación natural" y haber tenido el sentido práctico de utilizar un sistema de nombramiento útil y perdurable. En lo referente a las plantas, el mérito es haber escogido precisamente su aparato reproductor (las flores) como sistema de clasificación. Cuando Linneo anunció este sistema como "Sistema sexual" levanto no poca polémica y broma.

En aquel entonces se conocían muchas especies, pero se desconocían muchos procesos bioquímicos y sobre todo, se desconocía todo el mundo microscópico (bacterias y otros seres de una sola célula) y tampoco se planteaban nombrar a seres vivos que se hubiera extinguido. Pero, por otra parte, se estaba organizando multitud de expediciones alrededor del mundo, en aquellas expediciones frecuentemente iba embarcado un naturalista que era toda una personalidad en la expedición. Estos estudiosos frecuentemente se encontraban con animales y plantas que desconocían, pero gracias a este sistema de clasificación podían identificar caracteres, en muchos casos comunes a plantas ya conocidas, incluso europeas y ver que, aunque una especie sólo estaba en Europa, una familia o un género podían estar extendidos por varios continentes. Tal fue el caso de JOSEPH BANKS, naturalista que recorrió el mundo en los viajes al Pacífico sur de JAMES COOK entre 1768 y 1779. Banks fue uno de los primeros que aplicó el sistema de Linneo a las especies que iba encontrando. Como detalle anecdótico, en uno de los viajes de Cook, el navío Endeavour recaló en una bahía agrestre, en el lugar donde hoy se encuentra Sidney (Australia). Joseph Banks, bautizó aquel lugar como BAHÍA DE LA BOTÁNICA.

Joseph Banks, James Cook. el Endeavour y la Bahía de la Botánica (Botany Bay)

Algo más tarde, CHARLES DARWIN, hizo, su célebre viaje alrededor del mundo a bordo del BEAGLE (entre 1832 y 1836), capitaneado por ROBERT FITZROY. La descripción, recolección y clasificación de múltiples especies de seres vivos en Sudamérica le inspiró para alumbrar las bases de la teoría del mecanismo de la evolución que plasmó en su famosa obra EL ORIGEN DE LAS ESPECIES (1859). Todos estos naturalistas, cuando descubrían una planta con una flor parecida a la de, por ejemplo, el garbanzo, automáticamente ya sabían que era una leguminosa y así sucesivamente.

Charles Darwin, Robert FitzRoy, el Beagle y el Origen de las Especies

Y finalmente, el descubrimiento del material genético, de los genes y el ADN, y los avances en la ciencia y la tecnología que han permitido "leer" este código, han confirmado en buena medida que la clasificación de Linneo, su intuición y su ordenación, fueron las correctas. Que elegir aquellas características y no otras (por ejemplo en las plantas las flores) para clasificarlas era correcto, y que las plantas con flores diferentes tiene  menos similitud genética que las plantas con flores similares, era lo bueno. Así que se puede decir que en este campo el avance ha sido "al revés". Las evidencias experimentales han venido a explicar la observación hecha hace siglos y las conclusiones extraídas entonces a partir de la simple observación. La genética y las pruebas de biología molecular pueden explicar el proceso evolutivo y el proceso evolutivo ha sido el mecanismo de formación de la variedad de todos los seres vivos, de su agrupación. Y esa variedad es lo único que pudieron observar aquellos naturalistas.


DOS REINOS: En un primer momento Linneo, dividió los seres vivos en dos grandes REINOS: ANIMALES y PLANTAS (en latín, por supuesto, Animalia y Plantae, ya que los nombres de los niveles también se escriben en latín, aunque suelen traducirse) En esto, siguió la división básica que ya había establecido ARISTÓTELES (384-322 a de C.) varios siglos antes. La diferencia entre ambos, no son detalles tales como que unos se mueven y otros no. La diferencia entre ambos son cuestiones tan profundas como si hacen la fotosíntesis o no. Las plantas obtienen su alimento del dióxido de carbono de la atmósfera y lo transforman en sus células gracias a la energía solar captada por la clorofila, lo cual les da el color verde. Los animales necesitan devorar materia orgánica, o sea a otros seres vivos para obtener su alimento y su energía. Otra diferencia básica es que las células de las plantas  una pared rígida de celulosa y otras sustancias, gracias a eso se alzan enormes individuos decenas de metros tales como las secuoyas. Los animales tienen células "desnudas", no protegidas por pared alguna. Linneo no sabía nada de esto, no sabía lo que era la fotosíntesis ni las células pero la observación y la intuición le llevó a establecer esta clasificación en la cúspide.

Aristóteles y un animal-gato rodeado de plantas-flores (para que luego digan que no soy lo suficientemente sensible para inundar la red con inevitables fotografías de tiernos gatitos)

Pronto, los nuevos descubrimientos, sin invalidar el sistema lo matizaron y lo completaron. El MICROSCOPIO, ya había sido inventado por ANTON VAN LEEUWENHOEK en 1673, y él mismo pudo observar seres vivos que hasta entonces habían estado vedados para el ojo humano. ASí fue el primero que vio bacterias, paramecios, células y otros seres microscópicos. A todos ellos los llamó "animálculos" y probablemente Linneo, no se planteo clasificarlos.

TRES REINOS: En 1866 el biólogo ERNST HAECKEL, propuso tratar a estos seres vivos como al resto, pero la diferencia era tan grande que propuso un tercer reino que llamó PROTISTA, porque supuso que todos estos seres microscópicos y/o muy simples eran los primigenios, los más ancestrales, la representación de los seres vivos de los que descendemos todos. El reino Protista, fue un gran cajón de sastre en el que estaban multitud de seres microscópicos, desde las sencillas bacterias a los complejos paramecios. E incluso estaban seres vivos que no sabían donde meterlos porque presentaban características intermedias entre animales y plantas.

Ernst Haeckel, bastante asustado por lo que se le venía encima con la clasificación de los microorganismos

CUATRO REINOS: A medida que se fueron conociendo mejor estos organismos, los protistas,  se vio que en realidad eran muy, pero que muy diferentes entre sí. Pero la diferencia que más llamaba la atención era la de las BACTERIAS con el resto. Las células de las bacterias son muy diferentes del resto, no tienen núcleo y son mucho más pequeñas, por detallar algo. Estas células de las bacterias se llaman PROCARIOTAS, y las del resto de los seres vivos (plantas, animales y demás) EUCARIOTAS. HERBERT COPELAND en 1938 propuso crear un reino aparte llamado MONERA.

Herbert Copeland y una interesante y variada  colección de bacterias

CINCO REINOS: Hacía tiempo que los biólogos no sabían que hacer con los hongos. Inicialmente, se clasificaron como plantas, eran parecidos, estaban asentados en el suelo, tenían muchas veces algo parecido a raíces. Bueno, seguro que parece natural pensar que el hongo es un tipo de planta. Pero después se supo que al menos tienen dos diferencias dramáticas que los separa claramente. Por una parte,  al microscopio, las células de los hongos eran muy parecidas a las de las plantas, pero cuando se analizó químicamente su composición se vio que no estaban compuestas de celulosa sino de otra sustancia llamada QUITINA, curiosamente de lo que está compuesta la coraza de los insectos. Además los hongos tienen algo muy importante que también les diferencia de las plantas. Pueden vivir perfectamente sin luz o dicho de otra manera, no son capaces de usar la luz solar como fuente de energía y el dióxido de carbono. Siempre tienen que absorber materia orgánica. Son, en ese aspecto como nosotros y como todos los animales. Aquí tiene sentido eso de cultivar champiñón en una cueva sobre una capa de estiércol.

Conclusión, los hongos no son plantas, ni tampoco son animales. Son...HONGOS. Por eso ROBERT WITTAKER, en 1969, propuso la creación del reino FUNGI (que significa hongo, cómo no, en latín). Este reino nos ha sido muy útil. Un hongo era el moho Penicillium notatum, del que extrajo Alexander Fleming, la penicilina, el primer antibiótico en 1928. Las levaduras que transforman el mosto en vino o esponjan el pan son hongos microscópicos (que se llaman Saccharomyces cerevisiae). Las setas que encontramos en el campo, son, como ya lo habíamos supuesto hongos, pero, la seta que vemos es sólo el "fruto" que utilizan para reproducirse. El verdadero hongo está enterrado bajo tierra y es un discreto filamento que sigue vivo año tras año aunque cortemos la seta. De hecho uno de estos hongos subterráneos tienen el record de ser el ser vivo más grande del mundo. Pertenece al la especie Armillaria ostoyae y se extiende bajo tierra en los bosques de Blue Mountains (Oregón) en una superficie de más de 800 hectáreas.

Robert Wittaker. Consideró los hongos reino aparte. Supongo que no lo haría bajo los efectos de esta Amanita muscaria.

SEIS REINOS. No se asuste el lector, aquí acabo sacándome reinos de la manga. A simple vista (de microscopio por supuesto) las bacterias no se diferencian mucho entre sí. Los análisis de ADN y de composición química, la lectura de esa "novela" o de ese "texto" que todos portamos en nuestras células, refleja tan fielmente diferencias entre especies, animales y vegetales. ¿qué mejor que aplicar este procedimiento para ver las diferencias de esos seres tan minúsculos?. Bien, pues eso precisamente es lo que hizo CARL WOESE en 1990. Utilizó el último avance, el que da sentido a toda la ordenación de los seres vivos, la comparación entre los genes. Concretamente de unos genes (que para más detalles tienen el extraño nombre de 16S-rRNA y 18S-rRNA) que comparten TODOS los seres vivos. Aquí pudo verificar muchas de las diferencias ya intuidas por Linneo siglos antes.

Haciendo esto llegó  la conclusión de que las diferencias entre las bacterias merecía separar de ellas un grupo de microbios que llamó ARQUEAS. Tienen células simples, del tipo PROCARIOTA, pero son muy diferentes genéticamente y en otros aspectos a las bacterias y merecen un reino aparte. Muchos de estos seres son el ejemplo de que la vida puede desarrollarse en las condiciones más extremas. Habitan en el agua casi hirviente de los geiseres y aguas termales, en drenajes ácidos y tóxicos de minas tales como la de Riotinto en Huelva, e incluso en el intestino humano. ¿Qué el intestino humano no es un lugar inhóspito?. Recordemos por un momento el olor de una letrina.

Carl Woese, su curioso jersey bicolor y una Arquea

Pero volvemos a Linneo, por ejemplo en el reino vegetal o llamado en sentido estricto Plantae, como hemos visto tenemos agrupadas desde plantas con flores hasta plantas sin flores como los helechos e incluso plantas marinas como las algas.

Pero vuelta al inicio ¿dónde estamos nosotros?. Linneo, por encima de nuestra visión subjetiva, y también por encima de los convencionalismos sociales y religiosos de la época, se atrevió a afirmar algo que causó no poco escándalo. El ser humano es sólo un ANIMAL. Y como tal se puede nombrar con un nombre científico y se puede clasificar como lo haríamos un un vulgar hierbajo. Linneo para empezar le dio nombre binomial.

Homo sapiens

Lo de sapiens, es, evidentemente, un ejercicio de autocomplacencia. El Homo sapiens, como cualquier bicho viviente tiene su clasificación en función de sus características. Es, como ya podemos sospechar del género HOMO. La única especie del género Homo que existe en la actualidad es el Homo sapiens, el resto de las especies del género Homo están extinguidas y sólo tenemos constancia de ellas por los restos fósiles, tal es el caso del hombre de Neandertal (Homo neandertalensis) o el de Atapuerca (Homo antecessor). Ha habido mucho debate sobre si el hombre de Neandertal era o no una especie de Homo sapiens. Esto es prueba de que a veces las diferencias no son tan llamativas o tan relevantes. Se ha acudido a pruebas genéticas entre los humanos actuales y los restos de los neandertales. Se han encontrado genes neandertales en humanos actuales, pero tal presencia puede deberse tanto a híbridos como a antecesores comunes. Hubo un tiempo en el que a ambos se les agrupó en la misma especie y se les dio categoría de subespecie (Homo sapiens sapiens vs. Homo sapiens neandertalensis), por lo que no es raro encontrar estas referencias en los textos. Las características EXCLUSIVAS del Homo sapiens, son muy escasas si las comparamos con las diferencias con otros animales. Lo que hace que un individuo sea Homo sapiens y no otro Homo es fundamentalmente la forma de su cara, su mandíbula y su dentición, su frente, su escaso vello corporal, la constancia que tenemos de sus habilidades lingüísticas y manuales y ciertas evidencias genéticas. Todos los Homo sapiens que conocemos comparten esto, sean de la raza que sean y son capaces de cruzarse en cualquier mestizaje.

Grupo de Homo sapiens dirimiendo sus escasas diferencias genéticas a la manera tradicional, en Murrieta hace más de 140 años.

El género Homo, no es más que un género más dentro de la familia HOMÍNIDOS (Hominidae) Sin embargo, hay una serie de características que son comunes al género Homo y EXCLUSIVAS de él. Los integrantes del género Homo, actuales y extinguidos, desarrollaron un cerebro muy grande, el cráneo era vertical y se desplazaban a dos patas, verticalmente y además eran y son capaces de fabricar herramientas que guardaban. Del lenguaje sólo se puede teorizar porque lo que nos ha quedado de todos estos seres es sobre todo sus huesos y los elementos materiales que les rodeaban. Estas características nos separan de otros homínidos tales como el chimpancé (Pan troglodytes), el gorila (Gorilla gorilla), el orangután (Pongo pygmaeus) y los bonobos (Pan paniscus). también hubo homínidos extinguidos como el Australopithecus afarensis o el Paranthropus robustus, de los cuales sólo tenemos constancia a través de restos.

Homínidos famosos: Jane (hembra de Homo sapiens), Tarzán (macho de Homo sapiens) y Chita (hembra de Pan troglodytes)

Los homínidos no son más que un tipo se seres vivos del orden PRIMATES. Como en los anteriores niveles hay una serie de características que son EXCLUSIVAS de los homínidos y les diferencian de los primates no homínidos. Para ser exactos, lo que te hace homínido es poder andar a dos patas para tener las manos libres, las cuales están desarrolladas para manipular. La columna también está desarrollada para esto. Por otra parte tienen una dentición peculiar para comer de todo (son omnivoros). La capacidad del cráneo es mayor que en el resto de los primates, tienen un comportamiento social complejo y una especie de "lenguaje" de gestos. Estás características nos separan de otros primates como los macacos (como el mono de Gibraltar o Macaca sylvanus), los mandriles (Mandrillus sphinx), los monos titís (como el Callithrix jaccus) o incluso los lemures (Como el Lemur catta). Algunos primates son tan diferentes a nosotros que tienen tienen hasta rabo. Pero todos somos primates.

Primates famosos: Pippi Langstrump (Homo sapiens) y el Señor Nilsson (Saimiri scioreus)

Por eso decíamos al principio que no es que el hombre (y la mujer) procedan del mono, es que somos MONOS. La palabra mono no es una categoría taxonómica, es una palabra del lenguaje común para designar los primates homínidos y otros que se asemejan. Así que somos monos, cabezones y sin pelo, pero monos en definitiva.

Y claro, nuestros antepasados biológicos no humanos fueron también monos. Pero no eran ni chimpancés, ni mandriles ni lemures. Eran otros primates hoy en día extinguidos, por la misma razón que han podido fallecer nuestros abuelos y bisabuelos y nosotros poder coexistir con nuestros primos y pariente. Todos ellos son descendientes de las mismas personas y si nuestro antepasado común se encuentra en el siglo XIX somos familia más cercana que si tenemos que ir a la edad media para encontrarlo. Los chimpancés, primates y lemures son "primos", más o menos lejanos. Tenemos un antepasado común. Es como si todos los Homo, fuéramos primos hermanos de los que sólo ha sobrevivido uno y todos los homínidos fuéramos primos segundos y los primates primos terceros y así sucesivamente.

Y ya puede suponerse que la cosa no acaba ahí los primates son sólo un orden de los 21 que componen la clase MAMÍFEROS (Mammalia). Son primates aquellos que presentan una serie de características tales como cinco dedos, visión binocular, un tipo determinado de dentadura, uñas en vez de garras, presencia de clavículas, pulgar oponible (muy útil para agarrar y manipular), hemisferios cerebrales bien desarrollados y algunas otras. Esto nos diferencia de otros mamíferos como los caballos o las ballenas o los murciélagos.

Mamíferos famosos. Don Quijote de la Mancha (Homo sapiens), Rocinante (Equus ferus caballus), Sancho Panza (Homo sapiens) y Rucio (Equus africanus asinus)

Pero todos los mamíferos tenemos pelo, sangre caliente y amamantamos a nuestras crías que han nacido paridas por su madre, aunque unos habitemos la tierra, el mar o los árboles. La clase Mamíferos es sólo una de las clases del Phylum CORDADOS (Chordata), y, en concreto de la más reconocible subclase de los VERTEBRADOS (Vertebrata), y aquí encontramos lo que nos asemeja a otros animales como los reptiles o los peces. Todos los Vertebrados tienen esqueleto, cráneo y columna vertebral; tórax y abdomen.


Vertebrados famosos: Félix Rodríguez de la Fuente (Homo sapiens, además, de verdad) y su halcón peregrino (Falco peregrinus)

Y sí, finalmente, los cordados y vertebrados están incluidos en el reino ANIMALES (Animalia), que compartimos con unos "primos" verdaderamente lejanos. Los Invertebrados, los insectos como el saltamontes, los moluscos como el mejillón  y todo aquel ser vivo que se reproduzca sexualmente, tenga una célula "eucariota" (recordemos, muy diferente a la bacteriana) sin cápsula y que se alimente de materia orgánica.

Animales famosos: el pulpo Paul (Octopus vulgaris) y Napoleon Bonaparte (Homo sapiens) en su caballo (Equus ferus caballus)

Así que finalmente tenemos nuestra clasificación:


La taxonomía, es decir, la ciencia de clasificación de animales es algo vivo, se discute constantemente si una especie tiene que pertenecer a un grupo u otro, sobre todo a la luz de nuevos descubrimientos. Esto es especialmente real en el mundo microbiano. No hay que olvidar que aun se están descubriendo nuevas especies en todos los ámbitos incluido el fósil. Ya habíamos visto que sólo existe actualmente una especie de Homo (Nosotros Homo sapiens, pero el registro fósil nos revela al menos 14 especies del género Homo). Se han descrito 7 especies de homínidos, 448 especies de primates, 5.487 especies de mamíferos, 65.000 especies de cordados, 1.300.000 especies de animales y unos 2 millones de especies de seres vivos

Y todo por Linneo. No se puede decir que Linneo es uno de esos científicos que cayó en el olvido y que fue olvidado o maltratado en su tiempo. En este caso la historia del sabio incomprendido no se repite. En su tiempo recibió elogios tales como "poeta convertido en naturalista", "príncipe de botánicos", "Plinio del norte" o "segundo Adán". Aun hoy en día se recuerda su figura en Suecia y en el mundo entero. Lamento decir a becarios y principiantes en ciencias que la probabilidad que su labor sea reconocida a este nivel es cercana a cero, por muy relevantes que sean sus descubrimientos.

LOS SERES VIVOS VIVIENDO JUNTOS. EL VECINDARIO.

Ya nos podemos suponer que a los seres vivos no nos gusta vivir aisladamente. Y si no que alguien se pase por un centro comercial una tarde de sábado lluvioso. Los humanos, los animales, las plantas, las bacterias no se mezclan al azar. Si nosotros echamos un vistazo a las personas que se encuentran en la sala de un cine viendo una película y lo comparamos con un grupo de personas que este trabajando en una mina encontramos bastantes diferencias. Las personas que están en el cine tienen el interés de ver una película y esa película en concreto, además tienen el dinero para pagar la entrada. Las personas que trabajen en la mina tienen el interés y la necesidad de conseguir el dinero que les pagan, tienen las condiciones personales y profesionales para estar ahí, extrayendo mineral. Puede haber entre los espectadores de la sala de cine mineros y en la mina cinéfilos, pero igualmente habrá personas en la sala de cine que nunca trabajan en la mina y en la mina personas que nunca van al cine. Cada persona tiene su historia personal, que le ha llevado a la mina o al cine o a ambos lados o a ninguno de ellos. El cine y la mina son dos CONDICIONES diferentes, una persona puede adaptarse a una de ellas exclusivamente o a ambas. También habría  personas que nunca estarían ni en una mina ni en un cine.

Con los seres vivos tomados en su conjunto pasa parecido. En un lugar determinado del planeta tierra hay una representación de seres vivos. Están allí juntos, por algún motivo, cada uno con el suyo. Porque allí pueden sobrevivir, alimentarse, aprovecharse de otros seres vivos. Hay bacterias, hongos, plantas, animales.... El conjunto de seres vivos que pueblan un determinado lugar se conoce como BIOCENOSIS y al determinado lugar, en cuanto a sus condiciones no "vivas" se le llama BIOTOPO.Los seres vivos, o sea la biocenosis junto con el lugar que ocupan (la tierra, el agua, la roca, en definitiva, el espacio físico donde se encuentra o biotopo) se conoce como ECOSISTEMA. Esta palabra ya suena más, es más popular. Se puede decir que el ecosistema es como un VECINDARIO. La biocenosis son los vecinos  y el edificio es el biotopo y ambos juntos son el ecosistema. Los seres vivos ocupan sus lugares, como los vecinos ocupan un edificio. Hay pisos más grandes, con familias más numerosas o más pudientes, pisos más soleados, los vecinos tienen sus niños o no. Incluso puede haber un portero. Los habitantes tiene sus mascotas o sus parásitos que están allí porque los han traído ellos. Igualmente, la presencia de un ecosistema de un ser vivo depende de la presencia de otro que lo acarrea. Los vecinos están allí porque trabajan cerca, obtienen sus recursos en esa ciudad. De la misma manera, las plantas de un ecosistema se alimentan del entorno, del suelo cuya composición mineral es óptima para su especie. Muchas veces los vecindarios son reflejo de un estrato social de gente más o menos humilde o más o menos pudiente. Hay vecindarios de gente "superviviente" azotada por la crisis, como hay ecosistemas difíciles con carencias de agua o temperaturas extremas. También hay vecindarios opulentos, donde no falta de nada, como en una selva tropical (aunque no quiere decir que no haya rincones de escasez, en una urbanización de  lujo, las ratas de las cloacas pueden tener problemas de supervivencia) Cada persona tiene su historia que le ha llevado allí, algo tienen en común, aunque pueden ser diferentes. De la misma manera una persona igual podría estar en un edificio diferente. En los ecosistemas como en los vecindarios se establecen todo tipo de relaciones, amistosas, colaboradoras, hostiles..

Los ecosistemas no son estables en el tiempo, como los vecindarios no lo son. Los vecinos van y vienen, envejecen, tienen niños, mascotas, plantas, amueblan el piso, la gente se hace mas o menos amiga, se ayudan, otras veces se enfadan, los hijos de los vecinos se hacen amigos... En fin todos los cambios vitales. En un ecosistema, las cosas son parecidas, los árboles crecen, bajo su sombra crecen otras especies, los animales, comen plantas u otros animales y así sucesivamente, se crean relaciones. No digamos si ocurre algún acontecimiento externo como un incendio o una inundación. En un ecosistema estos hechos también alteran dramáticamente. la composición del vecindario. De la misma manera que si un ecosistema está influenciado por una condición que lo marca. Por ejemplo una marisma, está influenciado por la subida y bajada de la marea, por la constante inundación y vaciado del terreno. Sólo los seres vivos que soporten esto o que lo "disfruten" o sea los que se aprovechen de ello estarán allí. De la misma manera que en un bloque de apartamentos de una estación de esquí en invierno encontraremos sobre todo esquiadores. Como decíamos antes,  no quiere decir que todos los seres vivos que están en la marisma SOLO estén en la marisma. Por ejemplo hay peces y aves que también están en otros sitios. Como los esquiadores de la urbanización que también los podemos encontrar fuera de allí.

Uno de los motivos por los que la biocenosis (la composición de seres vivos) de un ecosistema evoluciona en el tiempo es la COLONIZACIÓN, es decir cuando, por alguna razón, los seres vivos ocupan un espacio que antes había estado sin ellos. Esto es una situación más frecuente de lo que parece. Por ejemplo, después de un incendio, en el que se haya destruido todo lo vivo de un espacio. Y en nuestra comarca ha habido una situación que nos ha permitido contemplar esto en directo. Me estoy refiriendo exactamente al ABANDONO DE LAS MINAS. En un momento dado, muchas labores mineras cesaron y dejaron al descubierto terrenos libres de vegetación. En un primer momento, ocupan el terreno las plantas más duras, las que menos tierra necesitan, las que pueden vivir en solitario, plantas arbustivas, que preparan el terreno para plantas menos resistentes, que sólo se desarrollan cuando la "sociedad" está ya establecida. Este proceso puede durar décadas y el aspecto de una mina o cantera que se ha abandonado hace décadas es muy diferente a una que se haya abandonado hace pocos años. Es como aquellos pioneros del oeste, que colonizaron el terreno asentándose en poblados de chozas, los únicos que eran capaces de vivir allí. Años más tarde llegó todo tipo de población y aquellos pioneros muchas veces cayeron en el olvido, como el hierbajo que llegó primero a una cantera y preparó el terreno para que crecieran otras plantas, que luego sucumbe bajo la sombra del árbol que llegó años más tarde. A este proceso se le llama, como no podía ser de otra manera, SUCESIÓN. Y aquí la naturaleza nos da una lección de lo que suele pasar frecuentemente entre los humanos.

Sucesión de colonización de un territorio sin vegetación

El final de esta sucesión se llama comunidad CLÍMAX y es un grupo de seres vivos que se mantiene más o menos estable si no ocurre ningún acontecimiento, humano o natural que altere las condiciones

Y ya que hablamos de plantas. Aunque no lo parezca, el objetivo de este artículo no es hablar de los ecosistemas. sino del paisaje vegetal. De todos los seres vivos, las plantas, configuran el paisaje de una manera determinante. A poco observadores que seamos nos daremos cuenta que los lugares son diferentes en una gran medida por lo diferente que es el mano vegetal que cubre la superficie de la tierra (o que no lo cubre, como es el caso de desiertos y roquedos de alta montaña). La comunidad de plantas de un lugar determinado, de un ecosistema se llama FITOCENOSIS, que no es más que la parte vegetal de la biocenosis.

Mirando a nuestro alrededor encontraremos, bosques, prados, matorrales. Son diferentes entre si y los bosques, prados y matorrales son diferentes dependiendo del lugar donde estén y de la región donde estén. y cuando digo diferentes es que tienen diferente COMPOSICIÓN. No quiere decir que las especies de plantas que haya en un prado sea radicalmente diferente de las que hay en un bosque. Es como en los vecindarios de los que hablábamos antes. Puede haber personas que puedan vivir en vecindarios diferentes, pero la composición general es lo que le da la característica al grupo.

Las comunidades vegetales, a pesar de todo, se pueden clasificar y poner nombre. Son, en cierto modo, como las especies individuales. Tienen sus parecidos y aunque cada lugar es diferente, si se mantienen determinadas condiciones físicas (soleado o no, régimen de lluvias, tipo de suelo, clima en general) es fácil que el grupo de plantas sea parecido y que podamos reconocer un mismo tipo de bosque, por ejemplo, en varios lugares diferentes.

La posición de las plantas y de sus agrupaciones sobre el terreno y sobre el mapa es toda una ciencia, en concreto una rama de la biología y la botánica llamada GEOBOTÁNICA o también FITOGEOGRAFÍA o también GEOGRAFÍA VEGETAL. Todos estos términos para una ciencia que tiene entre sus objetivos básicos describir qué plantas hay en cada parte del mapa, explicar por qué están allí y así de agrupadas y predecir en qué se pueden convertir si son alteradas. Es decir, la distribución de las comunidades vegetales en la geografía, sus causas, sus relaciones y las leyes que la controlan.

Ya podemos suponer que cuando vemos un bosque, en realidad estamos viendo una de esas comunidades de plantas. También hay animales u hongos, pero son menos aparentes. Un bosque está normalmente compuesto de árboles de varios tipos, puede que la mayoría de unas pocas especies. Luego tendremos también arbustos y plantas herbáceas. Cada tipo de bosque tiene sus especies características y están allí gracias a condiciones tales como el clima, la exposición al sol, el tipo de roca del suelo, la cercanía a ríos, la intervención humana, el tiempo que hace que se está desarrollando (por ejemplo si ocurrió en el pasado un incendio o si ha ocupado un desmonte o una mina) Toda una comunidad viva y dinámica, como un vecindario.

En el afán humano de clasificarlo y nombrarlo todo se desarrolló una clasificación de estas comunidades. El concepto de comunidad vegetal ya fue introducido por ALEXANDER VON HUMBOLDT y AIMEE BONPLAND en 1805. Luego, en 1979,  JOSIAS BRAUN-BLANQUET pensó que las comunidades vegetales podían agruparse, clasificarse y nombrarse con un sistema similar al que existía para las especies individuales. Por supuesto en latín y en agrupaciones que se contenían unas a otras, es decir un sistema JERÁRQUICO.

Alexander von Humboldt, Aimeé Bonpland y Josias Braun-Blanquet

Así, que de igual manera que se había hecho con las especies individuales, se estableció una serie de niveles que se contenían unos a otros y se les dio nombres, por supuesto en latín. Se usó, para cada comunidad un nombre compuesto. Por ejemplo: uno de los clásicos hayedos que ilustra los entrañables, tiernos y canónicos paisajes vascos de los calendarios de la caja de ahorros, tiene dos especies arbóreas características. Una de ellas es, como ya podremos suponer, el haya, que en nombre científico es Fagus sylvatica. La otra especie característica es una planta que no es un árbol, es más, es bastante discreta y si uno no se fija bien puede pasar desapercibida. Se trata de la saxifraga o quebrantapiedras cuyo nombre científico es Saxifraga hirsutans. En resumen, el nombre de este tipo de bosque es:

Saxifrago hirsutae-Fagetum sylvaticae

Como se puede ver: Los nombres de dos especies separados por un guión, declinados en latín, algo diferentes del nombre original, por formar parte de una ASOCIACIÓN. La asociación es a la geobotánica lo que la especie a la taxonomía. Es la unidad básica de clasificación. Las asociaciones de carácter parecido se agrupan en ALIANZAS, las alianzas en ÓRDENES y los órdenes en CLASES. Todos estos niveles (llamados SINTAXONES)  tienen su forma de nombrarlos, también en latín y con sufijos, sólo que diferentes y también derivados de especies típicas.

"El método fitosociológico". Francisco José Alcaraz Ariza. Universidad de Murcia (2013)

Las SERIES son el conjunto de ASOCIACIONES que proceden unas de otras. Cuando talamos un bosque, normalmente se forma una vegetación compuesta de unos matorrales o monte bajo. Bueno, pues esos matorrales son una asociación diferente y no es la misma si lo que se ha talado es un hayedo o un robledal. Así, a partir de una asociación se puede establecer un conjunto de asociaciones derivadas que suelen aparecer juntas. A este conjunto de asociaciones derivadas de una se le llama SERIE o SIGMETUM y la asociación "madre" es la correspondiente a la vegetación CLIMAX o CLIMÁTICA de la que hablábamos antes. Es decir aquella vegetación de la que proceden otras y que depende de factores tan básicos como el tipo de suelo o el clima. El hayedo del que hablábamos antes es una de las vegetaciones clímax y genera una serie de asociaciones que son derivadas que se llaman ETAPAS DE SUSTITUCIÓN y que en conjunto son la serie:

               Saxifrago hirsutae-Fago sylvaticae sigmetum

Este es el nombre científico con el apodo sigmetum, que significa serie y lo usamos para diferenciarlo de la simple asociación.  También se le dan nombres en castellano, que describen varias de las características. de esta asociación. Por ejemplo la serie de este hayedo tiene un nombre tan rimbombante como: SERIE CÁNTABRO-VASCÓNICA ACIDÓFILA Y NEUTRO-ACIDÓFILA DE LOS BOSQUES DE HAYAS.

Para saber que nombre ponerle a una cubierta vegetal determinada, los botánicos hacen un recuento en varios puntos de las especies de plantas que encuentran y registran su abundancia, bien en numero de plantas o en cobertura, esto es la superficie del terreno que cubren. Por ejemplo, un sólo árbol puede cubrir tanto como decenas de matorrales. Estos recuentos se llaman INVENTARIOS y así se analizan y clasifican las asociaciones vegetales

Bueno, ahora ya le hemos puesto nombre, a cada especie, a cada asociación vegetal e incluso a la sucesión de asociaciones que están relacionadas. ahora las vamos a ubicar en el espacio. Los políticos dividen el mundo en países, en función de comunidades humanas. Los botánicos han hecho lo mismo, pero en función de las comunidades o asociaciones vegetales. Son divisiones marcadas en gran medida por el clima y el tipo de suelo pero tiene  a la vegetación como elemento diferenciador.

Como en todas las clasificaciones anteriores impera el principio de jerarquía, es decir, que unas divisiones están contenidas en otras y así nos hemos dedicado a dividir nuestro planeta (por el momento no hemos encontrado plantas fuera de él) en partes diferenciadas por los vegetales que encontramos. a esas partes se las llama TERRITORIOS FLORÍSTICOS.

Hay territorios grandes y éstos están divididos en territorios más pequeños y éstos en otros más pequeños, como los países están divididos en regiones, provincias y municipios y luego cada municipio tiene sus vecindarios de los que hablábamos. La tierra, en su conjunto, está dividida en los territorios más grandes que son los REINOS. Los reinos florísticos abarcan en la práctica uno o varios continentes. La tierra se ha dividido en 5 reinos.

La Tierra dividida en Reinos

Nuestro reino HOLÁRTICO es enorme, abarca casi todas las tierras emergidas del hemisferio norte. El Reino Holártico está dividido en 8 REGIONES y nuestro Km-130 y el Valle de Somorrostro está en la región EUROSIBERIANA. De hecho la Comunidad Autónoma Vasca se encuentra "partida" en dos de estas regiones. Aproximadamente la vertiente norte de la Comunidad pertenece a la región Eurosiberiana y la vertiente sur en la región Mediterránea
Los Reinos divididos en Regiones

Las Regiones se dividen en PROVINCIAS, dentro de la Región Eurosiberiana nos encontramos en la Provincia ATLÁNTICA-EUROPEA que abarca todo el margen cantábrico  y atlántico de España, Francia, Bélgica, Holanda, Dinamarca y las Islas Británicas. En concreto. Desde el norte de Portugal hasta Bretaña se habla de una SUBPROVINCIA, la Subprovincia CANTABRO-ATLÁNTICA

Europa dividida en provincias
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Las provincias se dividen en SECTORES y los sectores en DISTRITOS. El Km-130 se encuentra en el Sector CÁNTABRO-VASCÓNICO  y en el Distrito SANTANDERINO-VIZCAINO

La Comunidad Autónoma Vasca y sus regiones y sectores

Lo curioso es que estas clasificaciones se han hecho con criterios de similitud en cuanto a la composición de la vegetación, de la misma manera que la clasificación de los seres vivos se hace con criterios de similitud en sus características. Podemos encontrar vegetación parecida en el distrito Santanderino-Vizcaíno que en los colindantes Vascónico-Oriental o Navarro-Alavés, pero más diferente del que podemos encontrar en los cercanos Castellano-Cantábrico o Riojano, ya que se encuentran en otra región (la mediterránea), condicionados por cosas tan determinantes como otro clima u otro tipo de suelo lo suficientemente diferente para dejar desarrollarse un tipo u otro de vegetación. Las diferencias con otras zonas del planeta pertenecientes a otros reinos tales como el tropical son más radicales,

Pero. ¿Quiere decir esto que dentro de nuestro distrito toda la vegetación es igual? Claramente no. Ya lo podemos ver. De la misma manera, todos los ciudadanos de un pueblo son legalmente iguales, les afecta lo mismo la Constitución que las mismas ordenanzas municipales, pero no hay dos barrios iguales y hay vecindarios distintos, tal como decíamos, en función de la edad de los individuos, su poder adquisitivo o simplemente sus preferencias. Con las plantas pasa lo mismo, dentro de  nuestro Distrito Santanderino-Vizcaíno hay muchos tipos de paisaje vegetal respondiendo a características del Distrito, pero también a condiciones más locales, como la exposición al sol o el tipo de roca del subsuelo.

PARTE DE NUESTRO PAISAJE VEGETAL. EL ENCINAR CANTÁBRICO

Euskadi, Vizcaya, Las Encartaciones, el Valle de Somorrostro, el Km-130. No se puede decir que nuestro entorno sea abundante en territorios vírgenes, más bien lo contrario. Ancestralmente, los humanos de esta tribu hemos hecho lo posible para meter mano en el paisaje. En nuestra zona raro es el lugar donde no se haya cultivado o pastoreado, convirtiendo la vegetación primitiva en sembrados y pastos. Se han talado masivamente bosques principalmente con dos fines: la fabricación del carbón y la construcción naval (durante el siglo XVI, la flota de Somorrostro fue la más importante del Atlántico), después, a veces se han repoblado con pinos y eucaliptos, mas pensados para la producción papelera y maderera y, para acabar de rematarla durante los siglos XIX y XX, las explotaciones mineras pusieron patas arriba el paisaje descarnando montañas enteras y precediendo a un desarrollo industrial que acabó con la mayoría de los ecosistemas de marisma al instalarse enormes complejos industriales en las zonas bajas

Pero eso no quiere decir que en nuestro territorio tan humanizado no existan comunidades vegetales. Por supuesto que existen comunidades vegetales y ecosistemas. Entre la selva amazónica y el apocalípsis industrial hay muchos escalones intermedios y son precisamente esos escalones los que tenemos más a mano. Nuestro aprecio y disfrute por la naturaleza debe empezar e incluso basarse en esos humildes hierbajos. No hay que esperar a visitar un parque nacional. Cerca de casa encontraremos plantas que luchan por la supervivencia adaptándose a medios húmedos o secos o luciendo sus mejores galas para ser polinizadas.

Y por eso aquí voy a hablar de una formación vegetal que ha dominado parte del paisaje del Valle de Somorrostro. el ENCINAR CANTÁBRICO. Ni siquiera se puede decir que exista en gran cantidad. Un pequeño bosque aquí otro allá y muchos restos. Matorrales y setos que configuran el paisaje actual y que nos hablan de antiguas cubiertas vegetales. Elementos que merecen un vistazo y una interpretación. Porque el aprecio por la naturaleza a veces es más importante en estos restos, porque nos hablan de que la vida salvaje esta aun presente en nuestro entorno.

Actualmente, de todo el Valle, donde más se reconoce estos ecosistemas es en el bajo Barbadún, esto es en las zonas costeras de Muskiz, Zierbena y en la zona más al norte de Abanto y Zierbena. No son grandes encinares. Por supuesto nada comparables con otros más aledaños tanto en Vizcaya como en Cantabria. Pero mantienen su carácter y aun se conservan restos que nos hablan del bosque primigenio.

Hay tres cosas que determinan principalmente el tipo de vegetación, sobre todo la vegetación CLIMAX, por lo menos estas tres cosas son primordiales a la hora de ver las diferencias de vegetación que tenemos más a mano.

1. La HUMEDAD del suelo. Esto es, la humedad de la "tierra" que recubre la roca que está debajo. Esto es variable en función lógicamente de lo que llueva, pero a igual lluvia, los terrenos serán más secos si la roca drena más fácilmente el agua o si el suelo es menos profundo.

2. El SOL que se reciba. En una misma zona hay los mismos días nublados que soleados pero cuando hay montañas y estas tiene relieves abruptos, todas ellas tienen una zona orientada al sur que se denomina SOLANA y otra orientada al norte que se llama UMBRÍA. Si además el clima es templado como el nuestro, puede haber días que en las zonas de solana haga realmente calor y en las de umbría no. Y de paso, en la solana por lo tanto habrá menos humedad, porque se evaporará menos.

3. La ROCA MADRE, no es lo mismo una caliza que una arenisca que una marga. Las caliza propicia los ambientes secos, drena bien el agua y por lo general el suelo es de poca profundidad. Además el relieve que forma es más abrupto. En resumen que, aunque indirectamente, también influye en las dos cosas anteriores. Además la composición química del suelo se deriva fundamentalmente de la composición química de la roca subyacente, son los mismos minerales transformados y degradados y a algunos vegetales les van mejor unos que otros.

En encinar es en realidad un tipo de vegetación que por muy acostumbrados que estemos a ella, es más típica de otras latitudes más al sur y de otros climas más secos que el nuestro. En realidad es un bosque mediterráneo. Es como si la costa cantábrica oriental fuera una "isla" en la que se dan las condiciones de poca humedad relativa y calor relativo para este bosque en algunos lugares. Esta "isla", está actualmente rodeada de zonas, más montañosas, más frías y húmedas en las que el encinar no se puede desarrollar y que aisla el encinar cantábrico de otros encinares de la península ibérica.

Está claro que el encinar cantábrico, se desarrolla y mantiene en las zonas que lo vemos pero ¿cómo han llegado hasta allí estas especies vegetales? La explicación la encontramos en los cambios climáticos. En los últimos miles de años, en los periodos en los que no existe historia ni memoria humana pero si rastros vegetales, hubo varias alternancias de clima frío y cálido. La Península Ibérica, pasó de periodos de miles de años de frío intenso (los periodos llamados GLACIACIONES), equivalente al de las actuales regiones boreales, a años de clima cálido más parecido al actual. En uno de esos periodos, que pudo resultar algo más cálido que el actual, los encinares avanzaron por el valle del Ebro y "saltaron" los puertos de montaña. El clima era lo suficientemente cálido y seco como para que incluso en lo alto del puerto pudieran desarrollarse estas especies. Esto ocurrió principalmente en el Puerto del Cabrio, "bajando" la vegetación mediterránea por el Valle de Mena y la cuenca del Cadagua. También pudo ocurrir en otros puertos que separan la cuenca del Ebro de la cantábrica, especialmente los de menor altitud. Así que hoy en día, a lo largo de estos valles se observa un "reguero" de especies mediterráneas. Otra explicación podría ser que, anteriormente a la última glaciación, esta vegetación ya había llegado allí y "resistió" al frió en algunos reductos costeros para luego expansionarse por donde pudo.

Algunas de las vías de entrada de la vegetación mediterránea en la costa vizcaína

De cualquier manera, al establecerse el clima actual, algo más frío, estos bosques quedaron "aislados" y no sólo aislados del resto de los encinares mediterráneos de la península sino incluso aislados entre sí. Ya les fue imposible volver a remontar los puertos, esas alturas, con sus fríos y su humedad ya se han convertido en barreras infranqueables.

El encinar cantábrico, como se ha dicho antes es una vegetación mediterránea en un clima que no es mediterráneo así que este bosque se encuentra en aquellas zonas en las que puede encontrar condiciones más parecidas a las mediterráneas. En realidad lo tiene difícil, y por eso no abunda o está muy degradado. El encinar "busca" los rincones de nuestra geografía donde más "a gusto" puede estar. Pero ¿qué es lo que busca?:

1. CALOR. A pesar de que en la vertiente cantábrica el clima es bastante uniforme. Ya nos podemos imaginar que hay sitios en los que hace más calor dependiendo de...

Exposición al sol. En las laderas de orientación sur son más soleadas (cuando hace sol, claro) en cualquier estación del año y en general a cualquier hora del día y por lo tanto en ellas hace más calor. Por ello es muy difícil encontrar encinares en laderas de exposición norte. La mayoría de los encinares aparecen en la solana de montañas, valles y colinas, en exposición sur o de componente sur.

Altura. En general, a mayor altura sobre el nivel del mar menor temperatura. Por eso los encinares aparecen próximos a la costa o más alejados siempre que se mantengan las cotas bajas.

Cercanía a la costa. El mar actúa como un "templador". Así, cerca del mar no hace tanto frío en invierno ni tanto calor en verano (porque el agua del mar tarda más en calentarse y enfriarse que la sólida tierra). El numero de heladas y de días fríos y con nieve en la costa es mucho menor que simplemente varios kilómetros al interior. También por eso también el encinar prefiere estar en la costa preferentemente.

Los TERMOTIPOS son la manera de llamar a régimen de temperaturas. La franja costera en color de rojo indica que esa zona es algo más cálida que el interior.

1. POCA HUMEDAD

Exposición al sol. Como se puede suponer, la insolación genera zonas de calor localizadas que lógicamente aumentan la evaporación de agua del terreno y por lo tanto hace que las laderas a la solana sean más secas que las laderas en la umbría

Cercanía a la costa. El régimen de lluvias, entre el litoral y las montañas que separan la divisoria de aguas con la cuenca del Ebro aumenta con la altura y con la distancia. Es decir, las zonas costeras son algo más secas, llueve algo menos. Así en Muskiz llueve algo menos que aguas arriba de la cuenca del Barbadún, por poner un ejemplo, en Sopuerta. así que existe una franja costera con menos lluvias y cuyos suelos, por lo tanto albergan menos humedad.

Roca madre. Esta es la roca que hay debajo de la tierra. Atendiendo al agua que cae, esta roca puede ser como una "esponja" es decir, que retiene el agua y aporta humedad a la tierra, tal como la arenisca. Pero por el contrario puede ser más impermeable como la caliza y hacer un efecto como una criba que permita descender a través de ella o sus orificios (por ejemplo cuevas) el agua de lluvia. Los suelos calizos son más secos como ya puede suponerse.

Pendiente. Si el suelo está inclinado en pendiente, el agua de lluvia, de una u otra manera acabará por bajar al fondo del valle con más eficiencia. Las pendientes más pronunciadas, favorecerán la sequedad a un mismo clima y condiciones de insolación. Además suelen tener menos cobertura de suelo.

Los OMBROTIPOS son los regímenes de lluvias o precipitaciones. Se ve como las zonas más húmedas son las zonas azul rayado que corresponde a montañas y a zonas interiores. Las zonas azules no rayadas son zonas relativamente más secas.

Así que si sumamos las condiciones de pendientes de exposición sur, de montes costeros y sustrato calizo nos encontramos con las condiciones más cálidas y de menor humedad del entorno y, como veremos son justamente estas las preferidas por el encinar cantábrico.


El encinar cantábrico es una ASOCIACIÓN, un tipo de vegetación climax que resiste en determinados lugares donde las condiciones son favorables. Esta asociación recibe, como todas un nombre en este caso es:


Lauro nobilis-Quercetum ilici

Como puede verse, nada más por el nombre ya podemos ver las dos especies características (Laurus nobilis y Quercus ilex). Pero vayamos por partes. El encinar es un bosque, es decir es un grupo de árboles. Se trata de un bosque cerrado, de hoja perenne, es decir que mantiene la sombra en su base durante todo el año y que es bastante cerrado por arbustos y lianas. Podemos dividir las plantas que encontramos por su porte:

ÁRBOLES.
Son los vegetales más llamativos y que "arman" el bosque, por lo que se habla de DOSEL ARBÓREO. El principal es por supuesto la ENCINA (Quercus ilex). Es algo diferente de la encina castellana (Quercus rotundifolia), aunque para hacer honor a la verdad se han encontrado muchos híbridos de ambas especies. En el encinar cantábrico costero, estos árboles son de baja altura aunque pueden llegar a los 10 metros, son los mayoritarios y son los que le dan el aspecto general al bosque.

Entre ellos encontramos otros árboles, no tan abundantes pero muy frecuentes el LAUREL (Laurus nobilis) o el MADROÑO o como se denomina popularmente en las Encartaciones BORTO (Arbutus unedo). Este conjunto no excluye la presencia de otras especies de árboles incluso caducifolios, pero mucho más minoritaria.


ARBUSTOS.
Son vegetales leñosos como los árboles pero en general de menor altura por ello les cuesta crecer bajo la sombra que dan las encinas en los lugares de mayor altura de estas. Por eso se desarrollan en los márgenes o donde las encinas y demás tienen baja altura y no compiten por la luz. Las especies más típicas del encinar son el LABIERNAGO (Phillyrea latifolia), el ALADIERNO (Rhamnus alaternus), el ROSAL SILVESTRE (Rosa sempervirens) y el BRUSCO o RUSCO (Ruscus aculeatus), este último bastante abundante incluso en la sombra.


LIANAS o TREPADORAS.
Algunas plantas han optado por "encaramarse" a árboles y arbustos en busca de la luz. En el encinar cantábrico las más frecuentes son la HIEDRA (Hedera helix), la ZARZAPARRILLA (Smilax aspera) y la RUBIA (Rubia peregrina). Forman lianas creciendo hasta lo alto de los árboles o en los setos son los principales componentes de la maraña de vegetales.


HERBÁCEAS.
Estas son plantas no leñosas que crecen en el suelo. El suelo del encinar no es muy abundante, por la sombra. Tres especies típicas son el ARO (Arum itálicum), un tipo de HELECHO (Asplenium oropteris) y el LASTÓN (Brachypodium pinnatum)



OTRAS.
Por supuesto que hay otras, la biodiversidad de un bosque de este tipo es mucho mayor, sobre todo teniendo en cuenta que al ser un bosque mediterráneo se "cuelan" con facilidad especies más comunes fuera de él. Pero hay un puñado de especies de plantas que tienen un especial significado. En las zonas más cálidas, en las más expuestas al sol aun perviven especies aun más típicas de zonas aun más cálidas. Son el LENTISCO (Pistacia lentiscus), un arbusto que se encuentra disperso en el encinar. La COSCOJA (Quercus coccifera), una planta del género Quercus como la encina, pero en forma de arbusto que cubre zonas completas como la ladera sur del Montaño u otras como el ACEBUCHE (Olea europaea), un tipo de olivo silvestre o el ALGARROBO (Ceratonia siliqua). Estas especies tienen especial importancia porque son los restos de las épocas de clima más cálido que propició la llegada de estos bosques a la costa cantábrica. En la mayoría de los encinares cantábricos no se encuentran o son muy escasas pero en el bajo Barbadún están especialmente presentes.


Además, nos solemos encontrara abundancia de matorrales de ARGOMA (Ulex europaeus) y GENISTA (Genista hispánica), en los bordes o en las zonas degradadas.



Pero esto es en condiciones ideales, este es el bosque CLIMAX, lo que veremos en nuestra comarca no es mayoritariamente esto (lo que le da más valor al poco que queda). Lo que veremos en el encinar representado en setos, zonas de arbustos, prados más o menos salvajes. En resumen lo que veremos son ETAPAS DE SUSTITUCIÓN. Es decir, asociaciones derivadas del encinar y, por supuesto, también el propio encinar. El encinar y los derivados forman una SERIE, que tiene el nombre del encinar:

Lauro nobilis-Querceto ilici sigmetum

En la siguiente imágen se puede ver cómo se transforma un encinar cantábrico en otras asociaciones, con sus correspondientes nombres. Estas asociaciones son principalmente de arbustos y prados y aparecen cuando se elimina o destruye la parte arbórea del bosque y se desarrollan los arbustos formando un monte bajo o aparecen prados si se usa con fines ganaderos. Por ejemplo, es habitual que cuando se produce un incendio en un encinar cantábrico, con el tiempo sobrevivan los madroños y se convierta en un BORTAL (Phyllireo latifoliae-Arbutetum unedonis)que luego puede incluso repoblarse de encinas o por otra parte desaparecer. De hecho hay lugares que se conocen como Bortal y no hay bortos, por lo que se sospecha que pudo haberlos en algún momento. También se puede transformar en un monte bajo con GENISTA (Genista hispánica), como uno de los principales componentes.

En  un primer nivel la asociación de bosque o climática Lauro nobilis-Quercetum ilicis. Se puede ver que se indica una variedad más "mediterránea" pero presente en nuestros bosques la subasociación pistacietosum (por Pistacia lentiscus).
En un segundo nivel tenemos las asociaciones de matorrales, en zonas más húmedas la Rubo-tametum, consistente en setos de zarzas (Rubus ulmifolius) y una enredadera (Tamus comunis). En zonas más secas, en encinar se degrada al matorral de genistas (Teucrio-Genistetum smilacetosum).
En un tercer nivel, los matorrales dan lugar a prados con herbáceas como Seseli cantabricum y Brachypodium pinnatum (Seseli-Brachypodetum).
Por debajo parecen asociaciones típicas de roquedos, zonas contaminadas con restos agrícolas, ganaderos o humanos (Urtico-Sambocetum, la típica vegetación con ortigas, Urtica dioica, y saúcos, Sambucus nigra) y finalmente a un prado de pasto más humanizado (Lolio-plantaginetum)

Bueno, pues con todo este panorama hagamos un repaso visual a lo que nos encontramos de estos ecosistemas en el bajo Barbadún. a ambas márgenes del río.

Margen Izquierda del bajo Barbadún

La margen izquierda del bajo Barbadún, tiene una serie de colinas que como podremos ver podrían propiciar la aparición del encinar cantábrico. Al norte de la N-634, todas las alturas son inferiores a 300 m de altura y se encuentran bajo la influencia marina. por un lado tenemos el núcleo principal. el sistema Pico Ramos-Janeo-El Haba-Cueto que se alinea en dirección NO-SE y aparte el alto de Capomar, un pequeño altiplano costero con una pendiente hacia el sur que desciende hacia el barrio de Pobeña. Toda esta zona pertenece al municipio de Muskiz

Viendo esto las dos zonas de insolación principales son las que se marcan en la imagen siguiente


La ladera 1 es la ladera sur del Pico Ramos que mira hacia San Julián y San Juan, incluye los barrios de Oyancas, Revilla, Las Duchas, Cordillas, las faldas sur del pico del Haba y la ladera sur del monte Cueto, en el límite con Cantabria. La ladera 2, es la ladera sur del alto de Campomar hasta el barrio de Pobeña. La ladera norte también tiene bastante insolación porque en realidad es un ligero altiplano. (Imagen Visor Geo Euskadi)

Como segundo aspecto veamos la LITOLOGÍA, es decir, las rocas que se encuentran en el subsuelo de esta zona.

Mapa de Litología (Visor Geo Euskadi)

La presencia de calizas es la condición ideal para que se presente el encinar, no es estrictamente indispensable, pero las condiciones de esta roca son las más favorecedoras. En esta zona, las calizas las encontramos en una extensa zona que corresponde a las cotas más altas del Pico Ramos, Janeo, El Haba y Cueto. Al sur de la N-634, hay dos afloramientos de calizas en las antiguas minas del Carrascal y en el monte Arenao. Estas zonas tienen exposición E o NE y por lo tanto no tiene  tanta insolación como las anteriores. El resto de la zona son margas calcáreas que tienen en algunos puntos bastante carbonato cálcico por lo que son casi calizas.(Imagen Visor Geo Euskadi)

Con esos dos datos, se pueden establecer las áreas en las que en ausencia de toda alteración DEBERÍA estar el encinar. Según el visor Geo Euskadi, se establecen tres zonas. El Alto de Campomar y lógicamente la vertiente sur del sistema Pico Ramos-Cueto. También propone la ladera de orientación NE Arenao-Carrascal, posiblemente en atención a su relativa insolación, a su baja altura y su sustrato calizo en algunos puntos

Mapa de series de vegetación potenciales (Visor Geo-Euskadi)

Sin embargo, momo ya podemos suponer el encinar no aparece prácticamente en toda esta extensión. El encinar se presenta en dos puntos muy reducidos, en San Julián y en el islote de la ermita del Socorro en Pobeña.

Mapa de vegetación con los dos encinares cantábricos señalados (Visor Geo Euskadi)

La extrema humanización de este terreno ha eliminado prácticamente todo el bosque original que sólo ha pervivido en dos reducidos espacios. Sin embargo, como veremos, existen restos de vegetación claros indicadores de la presencia anterior de estos bosques. Estos restos consisten sobre todo en:

SETOS, que se usan como separación entre prados y en los cuales existe una composición típica de encinar con aladiernos, labiérnagos hiedras y zarzaparrilla, y por supuesto, por encinas perfectamente desarrolladas. Existe una clara evidencia de que algunos setos, por su composición de especies vegetales son el único testigo del encinar cantábrico en algunas zonas.

MATORRALES. De las especies antes citadas y otras como genistas o argomas que son zonas de degradación del encinar no usadas para pastos.

Área Pico Ramos-Janeo-El Haba-Cueto

En la margen Derecha del bajo Barbadún, el encinar de mayor extensión y desarrollo se encuentra en el barrio de San Julián de Musques, se encuentra a baja altura y repartido en dos áreas diferenciadas.

Zona de exposición sur sureste (delimitada por la línea amarilla de puntos) del Pico Ramos. Esta ladera alberga tanto el encinar como sus etapas de sustitución. 1. Encinar desarrollado (área rodeada de línea roja). 2. Encinar degradado. 3. Setos de encinas restos del encinar primitivo. 4. Matorrales de argoma (Ulex Europaeus). SE puede decir que toda esta ladera, en especial sus zonas más bajas estuvo primitivamente ocupada por un encinar cantábrico-costero del que sólo resiste desarrollado la zona 1 que se encuentra incluso atravesada por una carretera. En la ladera norte hay una masa boscosa de caducifolios (5) que muestra que las condiciones allí ya no son óptimas para el desarrollo del encinar.

Degradación del encinar, con la altura y muy posiblemente con la tala. 1. Encinar desarrollado. 2. Restos de encinas, Aladiernos y matorrales de argoma y genista. 3. Zona libre de arbustos.

Las mimas áreas vistas desde otro ángulo.1. Encinar desarrollado. 2. Restos de encinas, Aladiernos y matorrales de argoma y genista. 3. Zona libre de arbustos.


Vista del encinar en su parte más baja y de mayor desarrollo, de unos 8-10 m de dosel arbóreo.
Las diferentes coloraciones del follaje evidencian las tres principales especies de árboles presentes: Encina (Quercus ilex), Laurel (Laurus nobilis) y Aladierno (Rhamnus alaternus).

Detalle del interior del encinar de San Julián


Zarzaparrilla (Smilax aspera) enredando con su liana una rama de encina. Una estrategia muy común en esta liana para alcanzar la luz en un bosque tan sombrío como el encinar. Además por el carácter de hoja perenne de las especies arbóreas del encinar (encina, madroño, aladierno, laurel), la penumbra se mantiene en toda época.

Copa de encina en San Julián

Aladierno (Rhamnus alaternus) en primer plano y encina al fondo

Detalle de aladierno

Encinar algo menos desarrollado (2-3 m), por encima del desmonte de la carretera que atraviesa el encinar de San Julián (BI-3794)

Lentisco creciendo en el terraplén. La presencia de esta especie indica condiciones cálidas y mediterráneas y no abunda en los encinares cantábricos.

Detalle de lentisco (Pistacia lentiscus)

Zona de degradación del encinar en el que predominan setos de argoma y zarzaparrilla junto con encinas de bajo porte y laureles y aladiernos.

Ladera sur  en el barrio de Cordillas. En este lugar se observan los restos del encinar primitivo en forma de encinas presentes en setos y encinas aisladas (líneas rojas), En contraste, bordeando un pequeño curso de agua al fondo de la vaguada (línea azul) se aprecia la acumulación de caducifolios arbustivos tales como avellanos (Corylus avellana) y sauces (Salix). En este caso la humedad ha impedido la aparición del encinar en este punto

Detalle de los retos del encinar de la foto anterior,

Encinas en setos en La Rigada, en la ladera sur del pico del Haba.

Ermita de Pobeña. El islote en el que se asienta la ermita del Socorro (1) es el único vestigio del encinar cantábrico en la ladera sur de Campomar. Aparecen algunas encinas sobre el acantilado, aprovechando la suavidad de las temperaturas por la cercanía a la costa. En la finca del Bortal (3), no se encuentran restos de una superficie importante de madroños (bortos) ni encinas, El madroñal o bortal, es el típico estado de un encinar en el que las encinas han sido taladas o incendiadas, por lo que sospechamos que primitivamente hubo aquí un encinar que desapareció y se transformó en bortal lo cual dio nombre a la finca.

Margen derecha del bajo Barbadún

Podemos extender la margen derecha del Barbadún hasta Punta Lucero y Serantes. Punta Lucero y Serantes, alineadas en dirección NO-SE son las dos principales alturas de la zona aunque inferiores a los 500 m. Separan la cuenca del Barbadún de la del Nervión-Ibaizabal y en ambas vertientes presentan amplias y en general escarpadas laderas. En la solana de ambos montes se encuentra el valle de Cardeo los cerros de la Quemada y Moreo y los Barrios de La Cuesta, San Mamés y La Arena, en el municipio de Zierbena. Hay una pequeña cordillera que conecta ambas montañas y que protege el barrio de Valles (Zierbena), en la Umbría de estos montes se encuentra el barrio de El Puerto (Zierbena). El municipio de Abanto y Ciérvana tiene en la solana de Serantes al barrio de Los Heros (Zonas 1 y 2 en la imagen)

La segunda zona montañosa de la margen izquierda del bajo Barbadún es el conjunto Montaño-Oceja-Peña San Andrés. Las cumbres pertenecen en su práctica totalidad a Zierbena aunque la zona más baja de la ladera de Oceja y Montaño pertenecen a Muskiz.  Estas montañas forman una pequeña cordillera con alineación NO-SE, paralela a la Lucero-Serantes (Zona 3 de la imagen)

Finalmente, un tercer área a considerar sería las laderas de Montaño hasta la N-634 a la altura de Las Carreras en Abanto y Ciérvana. Se trata de en realidad de una ladera suave que parte de una zona llana en Sanfuentes y el cerro de San Pedro de Abanto y desciende hasta el Barbadún. Incluiría los barrios de San Pedro, Murrieta y Las Carreras en Abanto y Ciérvana. En esta parte hay dos crestas de menor entidad que parten del barrio de Murrieta para morir en la llanura del Barbadún, Son los altos de La Guija y Reces que son dos laderas bastante escarpadas y paralelas al sistema del Montaño.

Analizando las laderas de mayor insolación de la zona tenemos las siguientes.


1 y 2 Ladera sur de Lucero y Serantes, a excepción de la umbría de Valles y de la encañada que baja al puerto.
3. Solana del Montaño, Oceja y la Peña San Andrés
4. Las Carreras, Colina de San Pedro de Abanto, cabecera del arroyo de La Bárcena, ladera de Murrieta y ladera sur de La Guija y Reces

Para comparar este panorama con las rocas subyacentes tenemos la siguiente imagen del mapa litológico

Las cotas más altas de esta zona son calcáreas, las crestas superiores de Lucero, Serantes, Montaño, Oceja y San Andrés son calizas. Por debajo de su nivel hay margas calcáreas. La zona de Las Carreras-San Pedro de Abanto únicamente tiene margas calcáreas (Visor Geo Euskadi)

Como en el caso anterior, la cartografía Geo Euskadi, propone la presencia potencial del encinar en las zonas de menor altura y de sustrato calizo. Descarta la zona de Las Carreras-San Pedro, aunque como veremos allí también se encuentran restos de encinar. (Visor Geo-Euskadi).

La zona está igualmente muy humanizada por lo que la presencia de los encinares es muy discreta. Hay dos pequeños encinares en La Cuesta (Zierbena) y en las inmediaciones de la iglesia vieja de San Pedro de Abanto, éste muy transformado. Pero la verdadera "joya" se encuentra en la ladera sur de Oceja-Montaño. Por extensión y desarrollo y por las comunidades  que le acompañan (como el coscojar de Montaño), es una de las zonas vegetales de más interés de la comarca. Igualmente, las laderas sur de Serantes y Lucero tienen profusión de setos y matorrales que tienen su origen en este encinar y que albergan especies de gran interés.

Mapa de vegetación con las tres zonas boscosas más importantes (Visor Geo-Euskadi)

Encinar de Oceja y Coscojal de Montaño

Con mucho, esta pequeña extensión representa más fielmente el encinar cantábrico, con todos sus elementos. Se trata de la vegetación que cubre la solana del sistema montañoso Peñón de Oceja (167 m), Montaño (319 m) y Peña San Andrés (248 m).

Vista de perfil del cordal Montaño-Portillo de Oceja al caer la tarde. Se observan claramente la solana y la umbría del monte. En la solana y en su parte más baja se observa en encinar más desarrollado y más alto, hasta la cresta la etapa de encinar más degradado con encina, aladierno y laurel de baja altura. Mas arriba, en las laderas del cono del Montaño aparece el coscojal.


Ladera sur del Peñón y Portillo de Oceja. En esta ladera se pueden diferenciar tres zonas. Por una parte, un encinar con un dosel arbóreo de más de 5 metros, umbrío y desarrollado y con caducifolios intercalados (en la foto, al ser sacada en otoño se aprecian por lo amarillento de su follaje). Por otra parte, un encinar más joven de menor altura que coloniza la ladera más escarpada del Peñón de Oceja y finalmente, en la ladera más expuesta a la costa, unos matorrales compuestos principalmente por genistas y encinas progresivamente diseminadas.

En rojo el encinar más antiguo. El encinar es una vegetación realmente mediterránea por lo que no se encuentra realmente en su óptimo climático. Por ello es frecuente que en algunos puntos se "cuelen" caducifolios que aquí se ven como manchas amarillas. Suelen ser, en este caso roble (Quercus robur) y avellano (Corylus avellana)

1. Encinar con caducifolios intercalados. 2. Encinar degradado en encinas en forma de arbustos, aladiernos y laureles. 3. Corte de la A8. 4. Arbustos procedentes de encinar primitivo dentro de la valla de Petronor.


Encinar de Montaño (en rojo) y en la zona superior el encinar-coscojar más joven (en azul)


Encinar de Oceja, en la parte inferior el dosel arbóreo alcanza mayor altura


En rojo (1). Encinar de mayor altura. En 2, se observa la desaparición progresiva de las encinas y su sustitución por un matorral de Genista hispánica como principal arbusto. 3. Cresta caliza


Detalle del encinar desde la carretera del Verde

Corte del terreno en el que se aprecia el sustrato calizo o margo-calizo en el que se asienta el encinar del Peñón

La cantera evidencia la naturaleza caliza de esta montaña ofreciéndonos una auténtica "disección"

Detalle de la caliza del Peñón y del Montaño en un muro de una granja del lugar.

Vista de los encinares desde la cresta del Peñón de Oceja.

Detalle de las copas de las encinas de mayor altura: 8-10 m

Detalle del interior del bosque, se aprecia un ejemplar de Laurel joven luchando por la luz.

Interior del bosque. Se observan enredaderas de hiedras, adosadas a los árboles de mayor envergadura, en una lucha por alcanzar zonas más iluminadas.

Zona marginal del bosque, también llamada ORLA.

En esta fotografía se aprecia claramente lo sombrío del encinar y la escasez de follaje por debajo del nivel superior. Al tratarse de especies de hoja perenne, la sombra es constante a lo largo del año. Las especies de árboles tales como Encinas, Laureles o Madroños tienen la estrategia de alargar sus troncos y desarrollar follaje sólo en las copas. Las lianas como la hiedra y zarzaparrilla trepan con tallos sin hojas hasta las copas y dan ese aspecto de lianas colgantes. Los arbustos como el labiérnago o el aladierno se desarrollan raramente en el interior o sólo en los bordes del bosque donde la luz es mayor. Y en el suelo quedan sólo aquellas especies que toleran un nivel de luz bajo.

Suelo del bosque. Rusco (Ruscus aculeatus) entre laureles jóvenes

Laurel joven (Laurus nobilis)

Una especie de Arum adaptada a las umbrías de los bosques

En los márgenes del bosque crece el lentisco (Pistacia lentiscus), propio de climas más templados.

Aladierno (Rhamnus alaternus), en el margen del encinar

Encinar joven colonizando los cantiles calcáreos del Peñón de Oceja. Con gran abundancia de encina.

Vista general, en primer término, varios ejemplares de Laurel y Madroño (Arbutus unedo)

Vista del interior del encinar desde la cresta caliza. Se observa cómo este bosque en su versión más juvenil presenta árboles de menor altura y un suelo de matorrales de argoma (Ulex) y genista, ya que en estas condiciones sí que aun existe luz suficiente para el crecimiento de estas especies.


Ladera sur del Peñón. Las encinas van dando paso a los matorrales de genista u argoma, posiblemente estemos asistiendo a la colonización de este espacio porque en fotografías antiguas se observa ausencia de bosque en toda la ladera.

Matorrales de genista
 
Genista hispánica y Rubia peregrina, composición del matorral

En este lugar, por su buena insolación y su sustrato calizo llega a aparecer el lentisco

Detalle de la ladera sur del Peñón.

Portillo de Oceja. En la cresta del cordal entre el Portillo de Oceja y su ladera sur hasta la base del cono del Montaño hay una vegetación compuesta de arbustos dispersos de Encina, Aladierno y Laurel de 2 m de altura máxima. Están acompañados de matorral de genista y argoma y coscoja.

El cono del Montaño, en su ladera sur, en aquellas áreas en las que no se han destinado a prados, encontramos un matorral característico: el coscojar. Este matorral se  caracteriza por la presencia de la coscoja (Quercus coccifera) que es una especie del género Quercus y por lo tanto emparentada con la encina (Quercus ilex) y el roble (Quercus robur), Aunque estos últimos sean dos árboles que pueden alcanzar considerable envergadura y la coscoja no sea capaz de ser más allá que un arbusto. Aunque las hojas de todos ellos sean tan diferentes (el roble incluso muda sus hojas en invierno), cuando dan su fruto delatan su parentesco ya que todos ellos tienen BELLOTAS por fruto, algo diferentes pero bellotas en definitiva.

La coscoja es una de esas especies genuinamente mediterráneas que han encontrado en la solana del montaño condiciones ideales de sol, pendiente y baja humedad. Por ello se ha desarrollado un matorral de 1 m de altura con esta especie como base una amalgama de las inevitables lianas de Zarzaparrilla.

En rojo, coscojar del Montaño, en su ladera sur.

Detalle de la pendiente

1. Zonas de coscojar que aparecen incluso en las laderas de la Peña San Andrés

Coscojar desde la peña San Andrés (1). Se puede observar (2) en la vertiente norte pinos de repoblación.


Viejas trincheras de la tercera guerra carlista y reutilizadas en la guerra civil, parcialmente colonizadas por el matorral

Coscoja, en primer plano (Quercus coccifera)

Ladera sur de Montaño

En ocasiones la coscoja puede alcanzar portes mayores.


La presencia esporádica de especies mediterráneas en esta zona no es rara. Aqui tenemos un enebro (Juniperus comunnis), cuyos frutos se han usado tradicionalmente para la elaboración de la ginebra

El Peñón de Oceja en 1910, en primer plano estructura protectora del tranvía aéreo Carmen VII-Pobeña y al pie de la montaña, la casa del Verde. Se observa que por esa época la deforestación de esta ladera es mucho mayor que en la actualidad por lo que se puede suponer que el encinar está realmente "colonizando" progresivamente esta zona.


El Peñón de Oceja en 1989, libre de autopista y tendidos eléctricos.

Murrieta y San Pedro de Abanto

A partir de aquí las zonas que vamos a repasar están muy humanizadas por lo que sólo se puede ver el encinar cantábrico a través de sus restos en forma de eriales y setos que delimitan prados y pastos. Estos elementos, aunque parezcan insignificantes son el refugio de la fauna salvaje de estas zonas y en ellas se pueden encontrar representadas casi todas las especies vegetales del bosque primigenio.

Las  laderas de la colina de San Pedro de Abanto están cubiertas en alguno de sus Setos por encinas desarrolladas que aunque no tienen la entidad de bosque cerrado ocupan una buena extension y desarrollo en altura

Robles alternando con encinas en un paisaje otoñal en San Pedro

Detalle del encinar en primavera

Copas del encinar y la torre de la iglesia sobresaliendo

En las cercanías de Murrieta y Las Carreras hay dos pequeños cordales que presentas sendas laderas muy expuestas al sol. Son los altos de La Guija y Reces. Están muy deforestados, pero el encinar primitivo está representado por una discreta masa arbórea flanqueando un camino en lo alto de la Guija y por una zona de arbustos de encina y aladierno y matorrales de argoma y genista en la ladera sur que desciende hacia las instalaciones de Petronor

En rojo, resto de encinar de Murrieta y La Guija

Laderas sur de la Guija

En rojo, encinar de Murrieta

Detalle de las encinas de La Guija, bastante desarrolladas por lo que posiblemente son restos del encinar primitivo.
Detalle de la zona de monte bajo de La Guija


 Lucero, Serantes y valle de Cardeo.

La deforestación y humanización de estas amplias laderas es muy alta. Los cordales de Lucero y Serantes dividen el Abra del valle de Cardeo. Lucero y Serantes presentan sendas laderas sur muy pendientes pero casi totalmente deforestadas. En Lucero sólo se encuentran restos del encinar primitivo en los setos de separación entre prados y en eriales con arbustos (aladiernos y encinas pequeñas) y matorrales (argoma, genista, zarzaparrilla..)

La masa boscosa de encinar más apreciable se encuantra en el barrio de La Cuesta, en la zona inferior del camino que sube al cuartel de Punta Lucero

En rojo, encinar de La Cuesta

En rojo, extensión total del encinar de la cuenta en exposición sur.
 
Ladera sur del monte Lucero 1. Matorrales de argoma y genista. 2. Zona de arbustos
Ladera sur de Punta Lucero: 1. Zona de encinar con muchas "incrustaciones"de caducifolios. 2. Prados 3. Matorrales de genistas y argomas.
 
Detalle de los restos del encinar primigenio en la ladera sur del Lucero, en las proximidades del barrio de San Mamés.1. Encinas en setos 2. Monte bajo de argoma (Ulex), genista y zarzaparrilla (Smilax aspera). 3. Prado

Zona de monte bajo en las laderas de Lucero

Pequeño grupo de encinas cerca de San Mamés, en un sustrato de margas.

Masa arbórea mixta en las laderas de Lucero

En el área de Serantes, los restos del encinar son asimismo muy escasos, los más apreciables se encuentran en las cercanías del barrio de Sanfuentes, cercanos a la carretera que une este barrio con Zierbena y sólo son grupos de encinas jóvenes asentadas sobre las margas más clacáreas y el laderas abruptas de exposición sur en la cabecera del valle de Cardeo, en exposición sur.


Zona de arbustos a ambos márgenes de la carretera

Se observa el carácter más calizo de las margas del sustrato rocoso


En rojo, acumulación de encinas jóvenes en el barrio de Los Heros.
 
Detalle del encinar anterior

El Serantes, en su ladera sur (2) está completamente deforestado, En la umbría de la cresta inferior (2) las condiciones no permiten el establecimiento del encinar cantábrico y se observa la presencia de caducifolios.

El valle de Cardeo es un valle abierto al oeste directamente a la playa de La Arena por lo que recibe la influencia marina directamente, esto supone una suavidad de temperaturas.



En la ladera norte del Montaño, en sus zonas más bajas se desarrollan masas de encinar cantábrico en el que se insertan algunos caducifolios. Las condiciones de suavidad por la cercanía del mar permiten esto.

En la solana del valle los encinares perviven en los setos de sepración entre prados (1)
Vista del valle de Cardeo desde la cabecera 1. Zonas de encinar a baja altura. 2. Caducifolios en zonas de mayor altura o en la zona de curso de agua

Parte de los lugares descritos en este artículo son objeto de protección legal por parte de las instituciones autonómicas, en concreto se califican como Áreas de Interés Naturalístico, al amparo de la Ley 4/1990 de Ordenación del Territorio del País Vasco, dentro de la denominada "Área de Zierbena"


En rosado, el espacio `protegido como Área de Interés Naturalístico-Área de Zierbena. Comprende los montes Punta Lucero, Serantes, en especial su vertiente sur. Montaño, Peña San Andrés y Peñón de Oceja y los cerros de Moreo y La Quemada. La ley considera que son "espacios a tener en consideración por el planeamiento territorial, sectorial y municipal con el fin de preservar sus valores ecológicos, culturales y económicos". En concreto, el Área de Zierbena se ha considerado en atención a las siguientes consideraciones. " La flora de este espacio es particular por el elevado número de especies mediterráneas que alberga: Quercus coccifera, Arisarum vulgare...Es así mismo la única zona conocida en el ámbito vasco de Genista legionensis, planta catalogada como En Peligro de Extinción, y de Stachys germanica.
La comunidad faunística es la habitual de la campiña atlántica. A ella se añade una especie claramente mediterránea como es el eslizón tridáctilo. Destaca también el lirón careto, ausente de la mayor parte de la vertiente cantábrica."


Es de destacar la intensa humanización de estos parajes que contrasta con los valores naturalísticos que se le reconocen, En la zona están asentadas industrias petroquímicas, centrales eléctricas e instalaciones portuarias. Está atravesada por autopistas de alta densidad de tráfico, líneas de alta tensión y oleoductos, además de una población de varias decenas de miles de personas. Esto es prueba de que no se debe despreciar cualquier rincón por humanizado que esté. Se puede suponer entonces el potencial biológico que presenta la zona por lo que cualquier actuación se debería realizar con la debida consideración medioambiental.

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Y para finalizar, una declaración. Visto todo esto, puede parecer desproporcionado e incluso pueblerino ensalzar estas modestas masas vegetales. Sobre todo si las comparamos con otras no muy alejadas geográficamente. No es mi intención hacer "podium" en ninguna comparación o entrar en ridículas discusiones de a ver quien "lo tiene más grande" (el encinar digo). El aprecio por lo cotidiano y cercano nos ayuda a preservar aquello de valor que nos rodea.

Pero además, fijándonos y disfrutando de lo que tenemos cerca y accesible preserva algo que a mi juicio es mucho más importante: nuestra capacidad de sorpresa y aprendizaje. No se puede estudiar un master sin aprender a leer. En cualquier rincón nos espera una "cartilla" y en no pocos rincones nos aguardan "tratados avanzados", porque como dijo Rousseau:

Hay un libro abierto siempre para todos los ojos, la naturaleza.

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Para la realización de este artículo se han consultado los siguientes documentos. Son absolutamente recomendables para ampliar información y avanzar en el aprecio de nuestro patrimonio natural.

LOIDI J, BIURRUN I, CAMPOS JA, GARCÍA MIJANGOS I, HERRERA M. La Vegetación de la Comunidad Autónoma del País Vasco. Leyenda del mapa de series de vegetación  a escala 1:50.000. Gobierno Vasco. Disponible en internet.

ONAINDIA M. Ecología vegetal de las Encartaciones y el macizo del Gorbea (Vizcaya). Servicio Editorial de la Universidad del Pais Vasco (1986)