miércoles, 23 de enero de 2013

Aniversario y editorial

Un año ya. No esperaba llegar a tanto. Cuando empecé el blog, se me pasó por la cabeza hacer una especie de presentación, declaración de intenciones, editorial,  o algo así. No fui capaz, no tenía ni idea de qué iba a poner. Por eso lo subtitulé "cosas de aquí y de allá", como punto de partida,  el Km 130. Las Carreras. San Pedro de Abanto, Valle de Somorrostro, un punto en el mapa. Un punto en la centenaria carretera transcantábrica.  Km 130, también K. 18, como reza el viejo leguario.


Ahora, con algunas entradas escritas, esto parece más fácil o al menos abordable. Y si no una presentación, si al menos haré algunas reflexiones.

Este no es un blog dedicado a demostrar que nuestro pueblo es el mejor del mundo, esto sería muy cateto por mi parte. Claro que es nuestro pueblo, e inevitablemente le tenemos cariño. Simplemente he creído que merecía la pena poner en valor una localidad y una comarca tradicionalmente olvidada por los circuitos turísticos y por los calendarios de la caja de ahorros.

¿Por qué poner en valor?. Muy sencillo, porque cualquier sitio vale. Cualquier lugar puede ser una buena muestra para aquel que sepa mirar y disfrutar de su entorno. El Km 130 es el nuestro pero no es mejor, aunque es tan bueno como cualquier otro para conocer la historia, la geografía, el medio natural, las gentes, en resumen todo lo que solemos buscar cuando pretendemos satisfacer nuestra curiosidad. Esto ha sido un hilo conductor de este blog, como nuestra carretera, que nos ha llevado kilómetro a kilómetro a cualquier sitio. Sacarle "jugo" a todo lo que nos encontramos, a veces simplemente con mirar por la ventana.

En realidad vivimos en una época dorada. Gracias a internet, en ningún momento de la historia una persona ha tenido acceso a tanta información y en ningún momento se han podido difundir ideas con tanta extensión. Además, en nuestro primer mundo disponemos de "tiempo libre" para acceder a ello y formarnos e informarnos e incluso entretenernos y disfrutar con ello y todo ello a un coste bastante bajo. Por eso, me resulta chocante cómo aun hay gente que su única vía de acceso a la cultura es realizar grandes viajes, visitar imponentes catedrales y museos de renombre mundial. Parece que después de pagar un billete de avión tenemos más predisposición a fascinarnos por cosas que, con un poco de interés podríamos haber descubierto ya en nuestro entorno más cercano. No es que desprecie la erosión del Cañón del Colorado, el gótico de la Catedral de León, la laurisilva de la Gomera o el Museo del Louvre, pero es que, me llama la atención  cuánta gente interesada en la geología hay en el cañón del Colorado y cómo ese interés se desvanece ante los estratos rocosos que descubre cualquier desmonte de nuestras carreteras.

Porque llegados a este punto puede ocurrir algo que yo ya califico de peligroso. Ahora, que parece que hemos llegado a cotas de educación e información nunca alcanzadas. Si ponemos como condición para disfrutar de la cultura, la realización de grandes viajes o la compra de costosos libros, o cualquier acto que suponga un gran desembolso económico, la cultura se convierte en algo elitista, sólo para aquellos que se lo puedan permitir. Y es una pena, ya que la capacidad de aprender directamente de lo que nos rodea es algo que no debemos perder nunca y eso pasa por apreciar todo aquello que podemos conseguir de manera sencilla, de nuestro entorno. Además, si tomamos la sartén por el mango de nuestra formación e información, evitaremos la permanente amenaza de la manipulación comercial y política a la que con tanta frecuencia nos vemos expuestos.

Pero claro, se me dirá: la cultura es "aburrida", es costoso aprender. No les falta razón a los que se disculpan con esto. Creo que la divulgación de la ciencia, el arte, la historia es tan importante como la producción científica o artística en sí. Es la permanente asignatura pendiente. La cultura es como la comida. Los alimentos crudos son duros de comer, difíciles de digerir, incluso tienen mal sabor y mal aspecto. Necesitamos alguien que nos los cocine, les añada especias y nos los presente en un plato de forma atractiva. los científicos, los historiadores, los exploradores, los inventores, los artistas, son los que cultivan la tierra, crían el ganado, pescan. Los divulgadores son los cocineros y camareros.

Ante la cultura, como ante la comida se pueden tener diferentes actitudes. hay quien disfruta de la comida cruda, poco especiada y poco cocinada. Son aquellos que no les importa lo aburrido y que son capaces de entender y procesar complejos conceptos. ¡Qué suerte!, no necesitan que les cocinen.

Los hay que son capaces de comer cualquier cosa, ávidos lectores de toda literatura y se interesan por todo. Se leen hasta el listín telefónico. Son como las ratas que sobrevivirán a lo que sea y nunca les faltará tema. Otros son muy exquisitos y sólo tolerarán grandes manjares en restaurantes de lujo. De estos ya he hablado (sólo circuitos culturales por los grandes museos).

Luego están los vegetarianos, alérgicos y celiacos. Tienen intolerancia ante grandes grupos de alimentos. Son aquellos que por formación, costumbre o simplemente gusto sólo devoran un género, sólo historia, sólo ciencia, sólo literatura, sólo novela negra, sólo aquello que me sirva para desempeñar una profesión etc.. Estos son un subproducto de nuestra generación. Cuando éramos jóvenes (con el fantasma del paro de los 80 y 90), se nos vendió la moto de que la especialización iba a ser la solución a nuestros males. Así nos hicimos "de ciencias" o "de letras" o "técnicos". Para "triunfar" en la vida. Y de golpe y porrazo nos vimos incapaces de adquirir un mínimo conocimiento de nada que no habíamos estudiado. Además teníamos inhibido el deseo de aprender y eso es como no tener hambre y que te tengan que dar la comida a la boca. Éramos JASP (Jóvenes Aunque Sobradamente Preparados), más bien éramos (JIASP) (Jóvenes Ignorantes Aunque Sobradamente Preparados).

Otros son los que les gusta la comida muy especiada, pero sólo con una especia o salsa. Estos son los que le tienen  que dar un tinte ideológico a todo. Son como los niños que todo lo comen con ketchup. Una salsa fuerte que aplana los sabores originales y hace que todo sepa igual, lo mismo una fruta que un  pescado. Quieren que todo tenga una interpretación ideológica, les gusta leer lo que les gusta oir. les gusta clasificar el mundo en buenos y malos, Si la comida tiene ketchup se devora, si no, se vomita. Sin medias tintas. No quieren sorpresas. Lo gracioso de todo es que si les dices que no te gusta el ketchup, dan por sentado que te gusta la mostaza, o la mayonesa. No pueden concebir que te guste la comida sin salsa (creen que no existe), esa es su dialéctica.

La mayoría de nosotros somos una mezcla de estos arquetipos. Lo triste es que cada vez hay más anoréxicos o incluso bulímicos, es decir que devoran información con la misma facilidad como la vomitan, la olvidan. Así no aprovecha.

Bueno, hay que ser optimistas. El 99% de la población  tiene los conocimientos necesarios para ser entrenador de fútbol, cosa bastante complicada. Esto se demuestra en las gradas de todo el país todos los fines de semana. Así que si se logra que haya interés por otras cosas, por capacidad técnica que no quede.

Como decía antes, ya un año, tengo que agradecer a las personas que en más de 3000 ocasiones se ha acercado a curiosear por este blog. Pero querría tener un agradecimiento especial a algunas que me ido encontrando o que ya estaban y no se me ocurre una forma mejor que haciendo un resumen del año (pinchando en el título de cada entrada se accede a ella).

El blog empezó dedicado a "cosas de aquí y de allá". Para asomarnos a nuestro pueblo, nuestra comarca, nuestro país y nuestro planeta en un avance concéntrico... con centro en el Km 130. Porque cualquier sitio es bueno para mirar al mundo.


Km 130. El inagural. Un repaso por los hitos kilométricos extendidos a este y oeste. Una muestra de lo que nos encontramos mirando al suelo mientras viajamos. Una reivindicación de la cultura de la carretera desde un lugar atravesado por una de ellas.

A propósito de esto, agradezco a JM Coronado que a través de su blog  (http://carreterashistoricas.blogspot.com.es/), expone su proyecto de recuperación de carreteras históricas, sus interesantes comentarios que me hicieron apreciar aun más este mundo. A Route 1963 (http://route-1963.blogspot.com.es/), que hace un excelente trabajo de estudio de la N-III y a Javi, mi profesor de BUP (http://cougallarta82.blogspot.com.es/). Ambos fueron los primeros que me referenciaron en sus blogs, lo cual da múchos ánimos en los primeros momentos

"Yo he conocido todo esto campas". Una muestra de las últimas transformaciones del pueblo. Un recuerdo a horizontes perdidos, me temo que para siempre.


Las raíces cantábricas de Ernesto Guevara. El Km 138. Con la N-634 como hilo conductor, nos encontramos al revolucionario, el pasado minero y el imperio romano. Una entrada muy visitada desde Latinoamérica.

El polvorín de los carlistas. Montaño. Una exploración espeleológica casera a la antigua usanza (pantalones vaqueros y linterna de petaca). Por un lugar de trágicos recuerdos bélicos.

Vacantes. Aquí hubo trabajo. Cómo se reclutaban maestros y médicos en nuestros pueblos antiguamente. Además, un sobrecogedor relato de la curación de una fístula en Castro Urdiales hace más de 200 años. No intentéis enviar el curriculum. Se ha pasado el plazo.


Parajes abandonados. Setares y Camposquerra. Un paseo por poblados mineros de antaño con un recuerdo a un asalto de bandoleros y a apariciones fantasmagóricas.

A propósito de esta entrada, he tenido la suerte de conocer un montón de personas aficionadas a los abandonos y a las que agradezco sus visitas en el blog. A Alexandra, de Lanzarote (http://sitiosdenadie.blogspot.com.es/), a Pedro de Barcelona (fotos y ruinas, qué gran combinación) (http://tempsviscuts.blogspot.com.es/), a Iván de Granada (http://photography-ka.blogspot.com.es/), Pero en especial quiero agradecer a Carlos, de Córdoba la Llana (como a él le gusta decir), un auténtico explorador urbano que siempre me deja un comentario alentador y que a través de su blog ( http://abandonoseneltiempo.blogspot.com.es/) nos descubre un montón de lugares en peligro de extinción con un montón de datos.

Apunte olímpico. 1992. Esta vez para recordar el paso de la Antorcha Olímpica por Las Carreras, y de paso hacer algunas curiosas comparaciones con el paso del tiempo.

Y tú ¿de quien eres?. San Pedro de Abanto Siglo XVI. Para cotillear de parentescos de vecinos. O lo que puede dar de sí un archivo parroquial maltratado por el tiempo.

Obras públicas. Pasarela Trinidad-Haritzalde. El tiempo cambia las cosas a veces muy rápidamente Esta entrada tiene hasta video.

Geología contra la pared. 140 millones de años nos contemplan. Sólo hay que mirar al suelo o ponerse contra la pared. No es un castigo (eso espero).


Paz en la Guerra. Escenarios de la batalla. Crónicas de guerra. Escenarios de la Batalla de Somorrostro de la mano de Miguel de Unamuno. Un repaso sobre el terreno por uno de los episodios más sangrientos de la Guerra carlista, que tiñó nuestros prados de sangre.

Y en general agradecer por supuesto a Alberto, que a través de su blog de "naturaleza y montaña" (http://naturmendi.blogspot.com.es/) nos enseña mucho más que naturaleza y montaña. Nos transmite el entusiasmo por el saber y el descubrir través de sus excelentes reportajes. Reportajes que "hacen afición".

Gracias a Zález, ejemplo de cómo se puede hacer un "blog total" (http://zaleza.blogspot.com.es/): historia, naturaleza, curiosidades. Con gran saber. Imprescindible para conocer La Bureba y nuestra común herencia cantábrica.

Comó no, agradezco a mi vecino y amigo Jose, que comparte sus paseos por nuestro entorno en su blog. Él ha sido  ayuda y compañía imprescindible en muchos de estos reportajes. Lo que da de sí el tiempo "pastoreando" niños o yendo al monte. He tenido la suerte de acompañarle en algunas de las aventuras reflejadas en su blog (http://kminandovoy.blogspot.com.es/).

En general gracias a todos aquellos que han visitado el blog y han dejado sus comentarios o me han referenciado en otros medios.

Y por supuesto, a mi familia, que me aguanta, con eso lo digo todo.

Me gustaría finalizar esta entrada con unas frases de Antonio de Trueba que resumen el espíritu del que hablaba al principio. 



Como dice un amigo, gracias por haber llegado hasta aquí. Si os he aburrido, disculpadme, soy sólo un mamífero omnívoro al que le gusta comer en compañía.